''Los casos de abusos en la Casa Cuna podrían superar el centenar''
Las víctimas de abusos sexuales en la Casa Cuna de Santa Cruz de Tenerife “podrían superar el centenar y los abusos podrían darse desde hace cuatro décadas”, ha afirmado a este periódico Antonio Toscano, presidente de la Asociación de Víctimas de la Corrupción Sexual infantil (AVICSI), cuyos psicólogos llevan más de un mes en la isla recabando testimonios de posibles afectados.
En dos meses, desde que se conoció este caso, unas treinta personas, ya todas adultas, se han puesto en contacto con esa Asociación para denunciar que también sufrieron abusos en la Casa Cuna de Tenerife.
CANARIAS AHORA desveló en junio pasado que un educador de la Casa Cuna de Santa Cruz de Tenerife, Julio C.G., había sido acusado de abusos sexuales continuados por cuatro personas, dos de ellas aún menores. Otras seis personas admitieron haber tenido relaciones sexuales con el educador, tanto en el domicilio de éste como en el mismo centro, durante al menos dos décadas. Cuando fue detenido en su domicilio en enero pasado, la policía se incautó de numeroso material pornográfico y de fotografías que mostraban relaciones sexuales completas de Julio con quienes le han denunciado.
Sin embargo, nuevos testimonios revelan que los abusos se podrían remontar más atrás en el tiempo, y que el propio acusado, que también fue un niño abandonado que se crió en esa Institución antes llamada Hogar Sagrada familia, igualmente pudo haber sido a su vez víctima de abusos.
Antonio Toscano, colaborador de la Policía Judicial en el esclarecimiento de casos de pederastia y desapariciones de menores, como el de la Casa Pía de Portugal, trabaja en la actualidad con la abogada Natalia Domínguez Castilla, que representa a dos de las cuatro presuntas víctimas de Julio C. G., recabando información para la mejor defensa de los presuntos abusados.
Toscano sostiene que los testimonios que han recabado en las últimas semanas apuntan a que los abusos en la Casa Cuna “se han sucedido durante al menos cuarenta años y las víctimas podrían superar el centenar”.
El presidente de AVICSI acusa al Cabildo de no haber actuado a tiempo, “después de que los propios trabajadores hubieran elaborado dos informes sobre la conducta sospechosa de Julio C.G., que no fueron tenidos en cuenta. Han tenido que pasar ocho meses para que le expedientaran por falta muy grave”. Asimismo señala “el mal funcionamiento de la Justicia canaria porque no se entiende cómo un señor al que detienen en su casa con una de las víctimas y al que le encuentran más de seiscientas fotografías penetrando a sus víctimas, siga en la calle, en libertad provisional”.
En cuanto a la asistencia psicológica que en la actualidad reciben las cuatro personas que han denunciado a Julio C.G., Toscano afirma que “no es una atención correcta, según han podido detectar los psicólogos de nuestra ONG, ya que se coacciona a las víctimas y, en todo caso, debe ser una asistencia que presten psicólogos clínicos forenses especializados en menores”.