Los Verdes cuestionan la respuesta a CC de Magdalena Álvarez sobre el 'Weatherbird II'
Los Verdes de Tenerife han coincidido con la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, en que se ha exagerado de forma alarmista la presencia en Canarias del barco Weatherbird II, pero “seguimos sin estar de acuerdo con la causa atribuida a esa alarma, que para nosotros no se desprende de las dudas que pudo haber sobre el rigor del Ministerio en sus competencias de seguridad marítima, sino que nos alarma que la decisión se haya basado en un juicio inquisitorial sobre un experimento científico”.
La ministra respondió en el Senado a una pregunta del senador de Coalición Canaria, Alfredo Belda, sobre el momento en que el Gobierno “adoptará una posición firme con respecto a la petición planteada por la empresa americana Planktos, Inc. para el atraque del barco Weatherbird II en el puerto de Las Palmas de Gran Canaria”.
El portavoz en Tenerife de Los Verdes, Octavio Hernández, señaló que “este desgraciado caso de injerencia política gubernamental en asuntos de índole científica seguramente será motivo de reflexión en el futuro, cuando se disipe la polémica y se pueda analizar el proyecto de fertilización marina sin las exageraciones que ha habido”.
Investigaciones en Canarias
Hernández insistió en que “son varias las investigaciones que se llevan a cabo en Canarias desde hace veinte años, sobre la proliferación planctónica en el Atlántico por el vertido de decenas de miles de toneladas de hierro procedente de las calimas del Sahara”.
El portavoz de Los Verdes aclaró que “la localización elegida por Planktos para su experimento en aguas cercanas a las islas probablemente no es ajena a las conclusiones de algunos estudios realizados en la Facultad de Ciencias Marinas de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria”.
Hernández se refirió a descubrimientos científicos realizados por investigadores de Ciencias Marinas, con financiación de los gobiernos Central y autonómico, sobre la existencia de “corrientes y remolinos asociados tanto a deposiciones atmosféricas como al flujo de carbono en el entorno de Canarias”.
De hecho, aclaró, “uno de los miembros del equipo científico del Weatherbird II estudió doctorado en la Facultad de Ciencias Marinas de la ULPGC; además fue uno de los investigadores encargado de estudiar el varamiento de zifios a consecuencia de los sonares militares”.
La presencia del barco en Canarias habría estado motivada, según Los Verdes, por el interés de Planktos de establecer colaboración con la Facultad de Ciencias Marinas y, en concreto, “la posible utilización del sistema de corrientes descubierto para canalizar el experimento y hacerle un seguimiento a lo largo de miles de kilómetros, aprovechando que las aguas de estas corrientes tienen la particularidad de que no se mezclan con las circundantes, creando una especie de canal oceánico”.
Hernández señaló que el Instituto Canario de Ciencias Marinas, dependiente del Gobierno canario, también lleva a cabo estudios sobre el impacto marino de las calimas del Sahara: “El actual director del ICCM, Octavio Llinás, fue el químico de Taliarte que en 1986 afirmó que el vertido de 64.000 toneladas de hierro del Ángela Pando en La Isleta no produciría contaminación”.
Al Gore
El portavoz de Los Verdes de Tenerife estima significativo que “la polémica se haya concentrado en el experimento y no en el objetivo comercial del mismo”.
Para Los Verdes “es curioso que apenas se haya cuestionado el uso que Planktos pretende darle a los resultados, vendiendo blooms de plancton por fertilización artificial como depósito de gases de efecto invernadero a empresas contaminantes que, a cambio de pagar por el vertido marino del hierro, emitirían CO2 por encima de la cuota asignada por el Protocolo de Kyoto”.
Octavio Hernández concluyó que “en todo caso, el rechazo institucional del proyecto de Planktos no debería justificarse mediante el juicio político o mediático de una investigación científica, sino posicionándose públicamente sobre el uso comercial que pretende dar a los resultados, porque incluso Al Gore cuando en su afamado documental habla de la industria de contenedores de carbono es a esto a lo que se refiere”.