El fuego devasta un tercio de la superficie forestal de Gran Canaria

El fuego, que se alza en la cumbres canarias, ha consumido ya una parte importante del triángulo que forman los pinares de Inagua, Pajonales y Ojeda, que es la superficie de pinar con mayor continuidad de toda la Isla. Sin embargo, no solo estas zonas se han visto afectadas por las llamas, puesto que el entorno de la Presa de las Niñas y de Chira, el Pinar de Piláncones y las proximidades al barranco de Fataga también se han visto afectadas. Por esto, la Fundación Foresta estima que la superficie de bosque quemada supone más de un tercio de la masa forestal de la isla. Además, la supervivencia de más de treinta especies de fauna y flora endémicas está seriamente amenazada.

De hecho, Foresta lleva desde finales de 2006 denunciando la falta de recursos destinados por el Gobierno de Canarias a tareas tan básicas en la prevención de incendios y mantenimiento de ecosistemas como la limpieza y el aprovechamiento forestal. En la práctica, los fondos en las partidas presupuestarias para la limpieza y mantenimiento del bosque canario son escasos, siempre según Foresta, a lo que debe unírsele una normativa que impide a los propietarios realizar las tradicionales actividades de aprovechamiento forestal.

Falta de un objetivo claro

“Estos motivos, seguidos de la falta de un objetivo claro para la conservación del medioambiente, constituyen los ejes claves que han propiciado que el efecto del fuego en Gran Canaria se haya multiplicado favoreciendo su expansión y convierténdolo en el mayor incendio de la historia del Archipiélago”, según la fundaciones.

Por esto, la Fundación Foresta se suma a las protestas de propietarios de fincas agrícolas y vecinos de las zonas afectadas ante las prohibiciones impuestas por la Ley de Espacios Naturales Protegidos. Así pues, propone como solución la aprobación definitiva de las Directrices Generales de Ordenación Forestal, que regularían de forma global la actividad forestal del Archipiélago y que podrían dinamizar la conservación y protección de los bosques canarios.

Foresta plantea, de cara al futuro, para garantizar la recuperación de las zonas afectadas y la conservación del resto del bosque grancanario, que las instituciones gubernamentales inviertan más y mejor en acciones de estudio, reforestación, mantenimiento y conservación de Patrimonio Natural Canario; que el medio ambiente se convierta en uno de los objetivos primarios del ejecutivo canario; y que se dinamizen las políticas forestales, poniendo en marcha, por ejemplo, el Plan de Desarrollo rural. Asimismo, se deben valorar urgentemente las pérdidas ocasionadas por los incendios, y poner en marcha ayudas específicas y compensaciones a los propietarios.

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