La gran cantidad de fango ralentiza las tareas
La gran cantidad de fango acumulada en el fondo del pozo en el que el pasado viernes se encontraron unos restos óseos mientras se buscaba a Sara Morales, desaparecida en Gran Canaria desde 2006, han vuelto a ralentizar las tareas para conseguir sacarlos de su interior.
La delegada del Gobierno en Canarias, Carolina Darias, ha explicado a los periodistas que, aunque en un principio se pensaba que sólo había unos 80 centímetros de fango y todo hacía pensar que la localización de los huesos pudiera concluir durante la mañana de este jueves, la realidad es que la gran cantidad de fango y lodo hace imposible predecir cuánto se tardará en encontrar esos restos.
“Estamos en lucha contra el fango”, ha resaltado Darias, quien ha pedido “tranquilidad y paciencia porque el trabajo no es fácil”.
Ha explicado además que siguen saliendo del fondo del pozo “objetos impensables” y ha resaltado el trabajo “incansable y excepcional” de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía que desde el pasado lunes trabajan en la extracción de los restos óseos, que fueron descubiertos con una cámara subacuática que ahora es inútil por el fango.
La delegada indicó también que en un primer momento el principal problema fue la gran cantidad de agua que había en el pozo -los restos se encontraron a 15 metros por debajo del agua-, lo que hizo necesario sustituir la primera bomba de extracción por otra más potente, “ya que con la primera seguía entrando más agua que la que salía”.
“Ahora se ha controlado el agua, pero el problema es el lodo”, señaló Darias, quien se declaró incapaz de calcular cuánto se tardará en encontrar los restos, aunque destacó que “se seguirá trabajando hasta que sea necesario”.
El pozo está en el interior de una casona abandonada del siglo pasado que primero fue una finca de explotación agrícola y en los años ochenta fue utilizada para trabajos relacionados con la construcción, según han indicado vecinos de Jinámar.
La zona donde se han hallado estos restos es uno de los “puntos” marcados por la investigación que lleva a cabo la Policía Nacional para tratar de localizar a Sara Morales, que tenía 14 años cuando desapareció.
La búsqueda en este pozo se realiza después de que acabaran sin éxito la tareas que se llevaron a cabo la semana pasada en un solar situado en las inmediaciones de un centro comercial de las afueras de Las Palmas de Gran Canaria a petición de la madre de la niña, Nieves Hernández.
