La nueva población de pinzón azul de la cumbre de Gran Canaria sigue al alza
La nueva población de pinzones azules de Gran Canaria asentada en la cumbre de la isla sigue creciendo y en estos momentos supera ya el medio centenar de ejemplares, según el último informe publicado por los responsables del programa Life de apoyo a la recuperación de esta especie.
Recientemente reconocido como especie diferencia de su pariente del Teide, el pinzón azul de Gran Canaria (Fringilla polatzeki) está considerado como una de las aves de bosque más escasas del mundo.
El último estudio publicado sobre esta especie (en la revista Peer J, de septiembre de 2017), cifraba su población en 280 ejemplares en la Reserva Natural de Inagua y en alrededor de 38 en la cumbre.
Esta última población se ha formado en los últimos años, en parte por movimientos naturales de ejemplares de Inagua que se han asentado en la cumbre y en parte por la liberación en esa misma zona de pinzones criados en cautividad el centro de aves de Tafira.
El último informe del programa europeo Life+ Pinzón estima que en estos momentos habitan la cumbre de Gran Canaria entre 27 y 93 pinzones azules y cifra su población más probable en unos 54.
En esos 20,7 kilómetros de pinares de la zona más alta de la isla la densidad de pinzones azules se ha duplicado entre 2016 y 2017, pero los autores de ese informe remarcan que ese gran crecimiento porcentual se debe, en buena medida, a que se partía de cifras muy bajas.
En estos momentos, los sectores de la cumbre con más densidad de población de pinzones azules son La Plata (4,8 aves por km2), el Pico de las Nieves (3,4 aves/km2), la Cañada de la Cruz (1,4 aves/km2) y el Roque Nublo (1,1 aves/km2).
Esas densidades son todavía muy inferiores a las de la Reserva de Inagua, principal reducto de la especie, donde se estima que viven entre 15,8 y 15,4 ejemplares por kilómetro cuadrado.