La pobreza tiene rostro de mujer
La consejera de Bienestar Social, Inés Rojas, ha reconocido en el Parlamento que “la pobreza sigue teniendo rostro de mujer”, por lo que la Ley de Prestación Canaria de Inserción aprobada por el Gobierno regional “tiene como principales beneficiarias a las mujeres con hijos”.
“Hay que tener en cuenta que el 75% de las familias monoparentales tiene como titular a una mujer sola con cargas familiares, y a esto debemos sumar que el mismo porcentaje, o sea, sobre el 75%, corresponde a las adjudicatarias de viviendas de promoción pública en alquiler construidas por el Gobierno de Canarias”, aseguró
Con todo, reiteró que Canarias es la comunidad autónoma “con menor diferencia salarial entre hombres y mujeres, como ha reconocido el propio Ministerio de Igualdad” y que el Archipiélago “se encuentra a la cabeza de la empleabilidad femenina”.
Rojas compareció a petición propia para analizar el III Plan de Igualdad, que culminó en 2007, y destacó también que “continúan los obstáculos que impiden la igualdad real entre géneros, de ahí la necesidad de contar con un Instituto Canario de Igualdad”.
Alabanzas y reproches
La diputada socialista Eulalia Guerra felicitó a Rojas por haber evaluado el Plan en el Parlamento, “lo que venimos demandando desde el principio de legislatura”, pero lamentó que “no haya traído ningún análisis de lo que se va a hacer ahora”, toda vez que el mismo caducó hace tres años.
“La transversalidad es uno de los aspectos menos desarrollados por el Plan, así como el de plena ciudadanía, que garantiza que todos tenemos los mismos derechos”, afirmó Guerra, que no obstante alabó “el gran trabajo que han hecho todas las directoras del Instituto Canario de la Mujer”.
Al respecto, la consejera destacó que el III Plan “fue un documento tremendamente ambicioso”, lo que se ha traducido “en ser muy complejo y de difícil manejo para sus ejecutores”, puesto que “nos pusimos en ese tiempo un techo insuperable”.
No obstante, resaltó “los programas 2 y 3, que tienen que ver con la erradicación de la exclusión social y la inserción laboral, en los que se han llevado a cabo 43 acciones y medidas”.
“Esta es una evaluación coja, pero sí nos da idea de los fallos y tira de las orejas a todos los que no se han implicado, incluyendo el Gobierno de Canarias, y ahora esperamos que nos traiga el siguiente nivel, que es saber que es lo que se va a hacer ahora”, insistió la diputada socialista.
“No vamos a ir a un IV Plan de Igualdad, queremos un pacto social, que supondrá mucho más compromiso, sobre todo, a la parte empresarial”, anunció Rojas.
Por su parte, la portavoz de CC, Flora Marrero, dijo que “es valiente venir a hablar de las debilidades del III Plan de Igualdad, porque nos viene bien a todos los partidos, que vamos a elaborar nuestros programas electorales, saber lo que hay que plantear para mejorar”.
Además, Marrero resaltó que el Instituto, ahora de Igualdad, haya pasado a depender directamente del presidente del Gobierno, aunque pidió al Ejecutivo que haya más transversalidad entre sus departamentos para que la igualdad sea efectiva en todas las acciones y leyes que lleven a cabo.
Los tres portavoces parlamentarios coincidieron en que, a pesar de la crisis económica, Rojas “no permita ningún recorte” en los fondos destinados a políticas de igualdad y lucha contra la violencia de género.
“El problema no es solo económico, es de concienciación, y hasta que no impliquemos tanto a las mujeres como los hombres, no se conseguirá que la sociedad avance, pues no puede hacerlo solo con su 50 por ciento”, culminó Rojas.