La polémica del 'chiki chiki' llega al Congreso
Los grupos políticos no tienen muy claro qué papel desempeñará la canción Baila el chiki chiki que representará a España en el próximo festival de Eurovisión porque, mientras unos destacan el humor, otros la consideran “un bodrio” y un “esperpento”.
En declaraciones a Efe, varios representantes de los grupos políticos en la Comisión de control de RTVE en el Congreso se han pronunciado acerca de la canción, y del baile, que representará a España en el próximo festival de Eurovisión tras ganar el concurso emitido por el ente público el pasado sábado.
Así, quien fuera diputado de la CHA en la anterior legislatura, el cantautor José Antonio Labordeta, opina que la canción es un “bodrio” desde el punto de vista musical, aunque le traiga sin cuidado tanto que España “haga el ridículo” como Eurovisión.
“¿Qué más da si ya hemos hecho el ridículo en infinidad de ocasiones?”, se pregunta Labordeta, en cuya opinión la actuación de Rodolfo Chikilicuatre, con su tema, será “un cachondeo”.
Con todo, admite que hay humor en el número del actor. “Será divertido”, vaticina Labordeta, quien piensa que este festival de música carece de todo interés y hace “mucho tiempo que está muerto”.
Para Luis Mardones, miembro de Coalición Canaria en la Comisión, la única manera de que el representante de TVE no haga el ridículo en la gala final del certamen es que se alce con el primer premio. “Si no, lo hará rotundamente”, ha manifestado.
En su opinión, deberían establecerse unos “filtros de calidad” para que esta clase de “personajes esperpénticos”, que “dejan mucho que desear desde un punto de vista artístico y estético”, participen en un concurso que se está degradando desde hace varios años.
Partidario del “humor en general”, el diputado electo del PP Alejandro Ballestero, también miembro de la Comisión de RTVE, prefiere “desdramatizar”.
No obstante, entiende que Eurovisión no es el sitio más adecuado para que España lleve una canción como Baila el chiki chiki, porque, si bien el festival ya no es lo que era, no deja de ser un “escaparate de los países y de su música”.
Con todo, le parece que la canción de Rodolfo Chikilicuatre es una “caricatura divertida”, aunque “sólo para consumo interno”.
A Carmen Alborch, portavoz socialista en el Ayuntamiento de Valencia y senadora electa, le gusta el número, pero tiene dudas acerca del papel que pueda desempeñar en el certamen.
A su entender, el sistema que ha escogido TVE para designar al representante español demuestra que el festival atraviesa “un nuevo tiempo”, en el que, como otros muchos eventos, es fundamental la “vertiente más participativa”.
Asimismo, opina que el certamen “poco tiene que ver” con la época en que representaron a España Massiel o Salomé.
La todavía diputada de IU-ICV Isaura Navarro, se reconoce una “fan absoluta” de Baila el chiki chiki y de su creador, y considera la canción finalmente seleccionada para representar a España en el festival de Eurovisión “un tema para el verano en potencia”.
Asimismo, Navarro se muestra de acuerdo con el método de elección al que ha recurrido este año TVE, ya que implica la participación del público, y ése es, a su juicio, el sistema más válido.
Neutro se muestra el portavoz de ERC en la Comisión, Joan Puig, quien ha aclarado que a su formación no le interesa “nada” este asunto y ha opinado que el proceso que ha empleado Televisión Española acaba dando prioridad al espectáculo sobre otras aptitudes artísticas. CiU optó por no pronunciarse.