El PSOE denuncia esperas de hasta 8 meses para rehabilitación en Tenerife
El grupo Socialista en el Cabildo de Tenerife denunció este lunes que existen listas de espera de hasta ocho meses para iniciar un tratamiento de rehabilitación en la isla de Tenerife, lo que provoca secuelas, algunas irrecuperables, en los pacientes.
Ana Lupe Mora, consejera socialista y Guillermo de la Barreda, representante del grupo socialista en el Consorcio Sanitario del Hospital Universitario de Canarias (HUC), denunciaron, además de las listas de espera para rehabilitación, el retraso en la puesta en marcha de la cámara hiperbárica y la deuda, “en algunos casos millonaria” con los proveedores del HUC.
Ana Lupe Mora alertó de los “graves problemas”, como el cierre de centros y el desplazamiento entre municipios de los pacientes, que sufre el servicio de rehabilitación, tanto en el norte como en el sur de la isla, “y lo peor es que hay pacientes que pueden quedar discapacitados”.
“Además de listas de espera, el servicio es deficitario, y lo achacan a falta de personal pero no es cierto; hay paro entre fisioterapeutas”, agregó.
En este sentido, de la Barreda ahondó en las “secuelas irrecuperables” que sufren algunos pacientes por los retrasos y señaló, como ejemplo, que la rehabilitación neurológica en el norte de Tenerife no existe y a los pacientes se les manda a los grandes centros.
De la Barreda también criticó la falta de transporte sanitario para la rehabilitación y dijo que un paciente que vive en El Tanque tiene que ir a La Orotava a al Puerto de la Cruz, “y como no hay transporte, se lo tiene que pagar de su bolsillo”.
Ambos consejeros también denunciaron la falta de puesta en funcionamiento de la cámara hiperbárica, homologada ya por la consejería, y que es fundamental para tratar diversas patologías.
De la Barreda indicó que existen hasta 18 patologías que pueden ser tratadas con la mencionada cámara; desde el pie de diabético, hasta infecciones graves, intoxicaciones por monóxido de carbono, o para pacientes que han sufrido radioterapias intensas.
No es de recibo que después del dinero que se ha gasto el Cabilo en la cámara no se utilice“, subrayó.
Por último, los dos consejeros denunciaron la deuda que el HUC mantiene con proveedores, deuda que no pudieron cuantificar por el secretismo que mantiene al respecto al consejería de Sanidad.
“La mayoría de los proveedores son pequeños empresarios a los que se les adeuda mucho dinero y no podemos dar cifras hasta que la consejería no nos pase los datos”, agregó de la Barreda.