El dirigente vecinal acusado de amenazar a la portavoz de C's en La Laguna pide su dimisión
Francisco Barreto, vicepresidente en funciones de la Federación de Asociaciones Vecinales Aguere (FAV Aguere), ha negado haber amenazado a la portavoz del grupo municipal de Ciudadanos, Teresa Berástegui, como ella misma expuso en el transcurso de la sesión plenaria que celebró el Ayuntamiento de La Laguna este jueves.
Berástegui denunció que había sido amenazada por una candidatura a dirigir la asociación vecinal si no retiraba una pregunta plenaria.
Este viernes, miembros de una de las dos candidaturas que concurren a las elecciones vecinales que tendrán lugar el próximo lunes, convocaron una rueda de prensa en el Centro de Las Madres, en la urbanización Padre Anchieta, en la que negaron las “graves” acusaciones de la concejal de Ciudadanos.
Francisco Barreto leyó un comunicado en el que muestran su “indignación” por la actitud de la concejal al no retirar la pregunta que había solicitado al entender que no era competencia del Ayuntamiento entrar dentro de un debate interno de la FAV Aguere.
Tanto Francisco Barreto como Daniel Plasencia, las dos personas que el jueves por la mañana visitaron a la concejal para pedirle que retirara la pregunta en la que interpelaba al alcalde sobre una de las candidaturas en las elecciones de la FAV Aguere, invitaron a Berástegui a hacer público el contenido de la grabación que ella dijo poseer con la conversación mantenida en el despacho de Ciudadanos, para demostrar, aseguraron, que “no son ciertas” sus acusaciones.
A este respecto afirmó que tiene “copia” de la grabación que se realizó en el despacho de la concejal e indico que la ha puesto en manos de sus abogados, “ que instruirán la correspondiente demanda judicial”.
Barreto y sus acompañantes pidieron a Teresa Beráestegui que “admita su equivocación” y presente “su dimisión”. Además, lamentaron la posición que han adoptado los grupos municipales por cuestionar su “honor y honradez” sin conocer la verdad de los hechos, dijo.
Barreto informó de que la plancha que él mismo encabeza para las elecciones en la FAV Aguere -que componen 58 colectivos de La Laguna- está formada por ocho personas, y negó que una de ellas sea el exconcejal Domingo Galván, como expone la edil de Ciudadanos en su escrito.
Domingo Galván es, en la actualidad, secretario “de alto cargo” de la Consejería de Hacienda del Gobierno de Canarias. En su pregunta, la concejal se refiere a él como el concejal que fue cesado por Fernando Clavijo, presidente del Gobierno canario, cuando aun era alcalde de La Laguna.
Con respecto a los motivos de la concejal que han llevado a esta situación, Bruno Barreto -hijo de Francisco Barreto- dijo que en estos momentos la FAV Aguere no es lo crítica que debiera serlo, recalcó que la edil de Ciudadanos está mal informada y puso el énfasis en que todo este lío haya saltado cuatro días antes de celebrarse las elecciones.
En su opinión, y en la de sus compañeros, esta “operación” estaba “orquestada”, porque pocos minutos después de plantear la concejal la denuncia en el Pleno, el tema era comentado ya en las redes sociales.
Sobre este asunto, los grupos de la oposición en el Ayuntamiento han pedido este viernes la retirada de las elecciones a la FAV Aguere de los implicados en las presuntas amenazas a la concejal de Ciudadanos Teresa Berástegui, según información de EFE.
Los representantes de Ciudadanos, PP, Por Tenerife y Unid@s se puede han considerado que las amenazas a los cargos elegidos democráticamente son “del todo intolerables”, que no pueden ser consentidas de ninguna manera, según señala un comunicado remitido por Unid@s se puede.
Ante esta situación y su gravedad consideran que las personas de la candidatura implicadas en esta acción, que ha sido denunciada ante la Policía, deben renunciar a estar en las elecciones, “por una cuestión de higiene democrática y de responsabilidad”.
El conjunto de la oposición opina que se debe tomar esta decisión ante un proceso que implica a una de las federaciones vecinales más importantes del municipio, que debe representar con plenas garantías unas estrictas formas democráticas y la pluralidad política que existe en nuestro municipio.
La oposición municipal defiende que se fomente una clara separación entre el movimiento vecinal y la acción política, “para evitar caer en las dependencias del pasado y lograr un espacio de trabajo hecho desde la ciudadanía”.