Justo cuando la tendencia -o al menos la de la Administración del Estado- es la de recortar ayudas públicas para las drogodependencias, en Canarias hacemos las cosas de otro modo. Incluso bien. Este sábado se inagurará en La Pardilla el nuevo edificio de Yrichen, una joya que se convertirá en el recurso de este tipo mejor dotado de Canarias, a decir de los entendidos. Con una inversión en torno a 1,2 millones de euros, el nuevo Yrichen contará con todos los elementos necesarios para prestar el servicio para el que ha sido diseñado según la experiencia acumulada en todos estos años por Jorge Hernández, el cura de La Pardilla y responsable de la iniciativa. El nuevo edificio tendrá un centro de día, un centro ambulatorio y un piso de apoyo al seguimiento para dar cobertura a las cuatrocientas personas que ahora mismo atiende en las instalaciones de la parroquia de La Pardilla. Pero con mayor comodidad y efectividad.