Hace una semana que Larry y Gago dijeron lo contrario -como comentábamos antes- a los directivos de TVE-C. En un almuerzo que terminó con muy mal rollo, Gago se puso en plan ultra y dijo que sus estudios demostraban que a Soria no se le estaba tratando como merece una excelsa figura como la suya y que había que arreglar el problema. Javier Jordán, que formaba parte de la delegación televisiva junto a Ángela Navarro y Clari Rivero, casi se le tiró al cuello asegurándole que el tratamiento que estaba recibiendo era superior al de los demás sencillamente porque su Excelencia sale en calidad de presidente del Cabildo, de presidente del PP y de presidente del Grupo Parlamentario. Como el espíritu santo, pero con gafas. Y Alemán, cabreado otra vez. Si es que no puede ser. Pobre tele pública.