El PP de Cantabria defiende que “siempre ha ganado a las encuestas y en las urnas”, por lo que, de cara a las próximas elecciones del 24 de mayo, aspira a tener mayoría suficiente para seguir gobernando la región.
“No renunciamos a nada” y “vamos a ganar las elecciones con mayoría absoluta”, ha señalado el vicesecretario de los 'populares' de la región, José Manuel Igual, en declaraciones a Europa Press a raíz de la encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Según el sondeo, el PP ganaría los comicios autonómicos en Cantabria, aunque sin mayoría absoluta, al obtener 13-14 diputados, frente a los 20 logrados hace cuatro años.
En ese supuesto, de no mantener la mayoría absoluta, la formación que dirige Ignacio Diego estaría dispuesta a gobernar en minoría, mediante acuerdos puntuales con otras fuerzas, y, también, estaría abierta a pactos con otros partidos, como ha apuntado Igual.
Pero en eso pensarán a partir del 24 de mayo porque, hasta entonces, el PP va a “trabajar por los ciudadanos hasta el último día” de la legislatura con el fin de “mejorar” Cantabria.
De todas formas, el también diputado autonómico del partido ha apostado por “ganar a las encuestas” y lograr en las urnas “mayoría suficiente para gobernar”. En este sentido, ha recordado que hace cuatro años los sondeos no les daban mayoría absoluta, y ha recalcado al respecto que en el PP “no renunciamos a nada”.
Y después de apuntar que los sondeos son “una foto fija en un momento dado”, el igualmente alcalde de Arnuero ha defendido que su partido es el “único” que puede “garantizar la estabilidad”.
Al hilo, ha señalado que el actual Gobierno es “fiable” y “estable”, y que trabaja para sacar a Cantabria de la crisis. A este respecto, ha comparado la región con “un barco” que hace cuatro años “estaba a la deriva” y a punto de entrar en el “desguace”, y que ahora -ha dicho- ha vuelto a “flotar”, en alusión a la recuperación económica.
No obstante, y para finalizar, José Manuel Igual ha admitido que esa recuperación “no llega a la gente” aún, y “no se percibe” entre los ciudadanos que, como ha reconocido, pueden “penalizar” al partido de gobierno por tomar medidas que no han sido “agradables”.