La ministra de Igualdad y exconcejala de Educación y Cultura del Ayuntamiento de Valladolid, Ana Redondo, ha anunciado este jueves que la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), cuya 70 edición comienza mañana, se incluirá dentro de las subvenciones nominativas al igual que otros festivales como el de San Sebastián o Sitges.
Esta situación permitirá a la Seminci obtener la subvención directamente sin tener que competir con otros certámenes.
La ministra, en declaraciones a la Cadena Ser, ha recordado que esta era una petición del Ejecutivo municipal anterior pero que el Gobierno no lo consideró en ese momento.
Sin embargo, en esta ocasión la ministra ha asegurado que “están trabajado con el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, para que sea una realidad”.
“Y en vísperas de la 70 edición de Seminci, creo que el ministro podrá anunciar que esto se va a concretar y, por lo tanto, Seminci va a conseguir esa subvención nominativa”, ha asegurado.
De hecho, el ministro asistirá mañana a la gala de inauguración y ha convocado a los medios.
Este anuncio ha sido recibido con esperanza por parte del director del festival, José Luis Cienfuegos, y del alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero (PP), aunque este último ha criticado que sea Redondo y no el ministro de Cultura, Ernest Urtasun (Sumar), el que haya anunciado este paso a la subvención nominativa, lo que a su juicio expresa lo “necesitada” que tiene que estar la ministra de hacer anuncios que no le corresponden.
“Esta señora ministra lo que tiene hacer es luchar por la igualdad de las mujeres, también las de Valladolid, y a eso se tiene que dedicar: a trabajar por la igualdad que es lo que le ha encomendado su presidente de gobierno, el señor Sánchez”, ha señalado.
El fin de “una cierta anomalía”
Por su parte, Cienfuegos ha reconocido que “había una cierta anomalía” dado el peso de este certamen en número de películas, espectadores y profesionales implicados y ha reconocido que “espera que se convierta en realidad”.
“Era muy claro que al festival le correspondía otro lugar y espero que para el año que viene, cuando ya se acepten los presupuestos, se convierta en una realidad y estamos muy esperanzados de que eso sea así”, ha afirmado.
El director de la Seminci ha incidido en que esta nueva situación permitirá ampliar áreas y actividades ya que las subvenciones por concurrencia competitiva “tienen un tope” y que en esta edición ha ascendido a 105.000 euros, una cantidad pequeña para un festival con un presupuesto de más de tres millones de euros.
En su opinión, un “agravio comparativo” con otros festivales que tienen la tercera parte de presupuesto financiado por el Gobierno, en un certamen dedicado al cine de autor y muy relevantes para la industria y la distribución independiente, porque muchas de las películas que llegan a las salas comerciales se estrenan previamente en Seminci.
Relación con Cultura
Por su parte, el alcalde de Valladolid también ha coincidido con Cienfuegos en que el próximo año esa subvención nominativa “sea una realidad” y ha insistido que desde que llegó al gobierno de la ciudad han hecho “lo que correspondía” , ya fuera a través de mociones, cartas y contactos personales con el ministro Urtasun, como tuvo lugar en la última Gala de las Artes Escénicas, que acogió Valladolid.
“Dar el salto de la concurrencia competitiva a la subvención nominativa era de justicia, porque es que el festival técnicamente ha ido escalando cotas y se ha puesto en una posición, en la cual si San Sebastián y Málaga están en la nominativa, cómo no va a estar Valladolid”, ha subrayado.
Carnero ha incidido en la “magnífica” y “buenísima relación” entre el Instituto de Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA) y el Ministerio, tanto a nivel técnico como político, y ha aprovechado para criticar a otros departamentos del ejecutivo nacional: “ojalá con otros ministerios tuviéramos la relación que tiene la ciudad de Valladolid con el ministerio de Cultura”.