Un juzgado de lo Penal ha condenado a dos años de prisión y multa a Enrique Arnal, exdirector financiero de Emarsa, la empresa que gestionaba la depuradora saqueada en la época del PP. Arnal es culpable de un delito de insolvencia punible: ocultó gran parte de su patrimonio para no hacer frente a indemnizaciones si es finalmente condenado. El juicio por Emarsa se celebrará el 13 de marzo.
Además de Arnal, han sido condenados su expareja (Eva María Marsal, también dos años de prisión y multa) y su hermano (Antonio José, 9 meses de prisión y multa) como cooperador necesario en el delito. Otros cuatro procesados y una mercantil (Comunica con Trendy) también han sido condenados como cooperadores necesarios.
Arnal y su hermano deberán indemnizar a las matrices de Emarsa (Emshi y Epsar) con 233.000 euros por haber ocultado bienes como pisos o coches de lujo, por ejemplo un Audi Q7. Arnal y Marsal han sido condenados a pagar a las mismas sociedades públicas 201.000 euros. El exdirector financiero alegó en el juicio que vendió sus participaciones empresariales y bienes inmuebles debido a su adicción a las pastillas y a la depresión que sufría.
Un saqueo de 24 millones de euros
El 13 de marzo comienza por Emarsa. Según la Fiscalía, el exvicepresidente de las Diputación de Valencia y exalcalde de Manises, Enrique Crespo, saqueó la depuradora de Valencia hasta quedarse con casi 24 millones de euros. Lo hizo, según el juez y la Fiscalía, en connivencia con varios altos cargos de la empresa, que manipulaban al alza los costes de la empresa para recibir más dinero de la Generalitat que luego gastaban en casas, prostitutas, viajes y comilonas.
Los 24 millones supuestamente robados no aparecen, en lo que para las acusaciones particulares puede ser un “alzamiento de bienes de libro”. 375.000 euros se volatilizaron en restaurantes – pagaban hasta invitaciones a café con cargo al contribuyente- y otros 261.000 en hoteles de París, Varsovia, Lisboa, Munich, Bucarest o Andorra.