Las cosas de palacio van despacio cuando se trata de la gestión pública. Y más si de esa gestión se deriva la cesión de la titularidad de unos terrenos de una administración a otra, en este caso, de terrenos portuarios de la Marina de València.
El alcalde, Joan Ribó, remitió el pasado 1 de septiembre una carta a la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, por medio de la cual solicitaba una reunión para tratar la desafección de los espacios de la Marina que siguen siendo de titularidad de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), para su cesión al Ayuntamiento con el objetivo de potenciar su gestión y desarrollo para uso de la ciudadanía y al mismo tiempo de liberarlo del pago de determinadas tasas.
En la misiva también se solicita la autorización o concesión demanial gratuita de los espacios situados en las defensas marítimas y lámina de agua.
Ante el silencio por parte del ministerio, se mandó un recordatorio a las oficinas ministeriales sin que hasta ahora se haya dado una respuesta, pese a la necesidad urgente de articular un nuevo órgano gestor para la Marina de València, al estar el Consorcio Valencia 2007 en proceso de liquidación, tras la salida del ente de la representación gubernamental una vez condonada la deuda.
Como avanzó elDiario.es, Ribó dirigió una primera carta sobre el asunto a la APV, a la que el órgano portuario vino a contestar que la decisión excede a sus competencias y que la solicitud se debe dirigir directamente al Gobierno.
Con todo, el Ayuntamiento y la Generalitat siguen avanzando en el modelo de gestión una vez se liquide el Consorcio si no hay más retrasos a finales del presente año.
Este lunes se reunieron el presidente del Consell, Ximo Puig, y el alcalde Joan Ribó, en el Palau de la Generalitat y acordaron la creción de una nueva empresa pública o de una fundación participada por ambas administraciones en sustitución del Consorcio y que sería la Generalitat la que daría cobertura jurídica a la gestión de la lámina de agua como un puerto deportivo autonómico más.
Actualmente, unos 500.000 metros cuadrados de la Marina de València los conforman la lámina de agua y otros 500.000 los diferentes espacios en superficie. De ellos, el Ayuntamiento ya es el responsable directo de un 30% de los terrenos que se desafectaron en su día, concretamente, de la parte de los tinglados, la estación marítima, las bases de la Copa del América y el edificio Veles e Vents.