Rollos de huevo murcianos, el dulce típico para disfrutar una merienda con sabor a tradición

El postre más típico y a la vez curioso de la Región de Murcia es el paparajote: se hace recubriendo la hoja del limonero con una masa de harina, leche y huevo fina y muy crujiente bien embadurnada de azúcar y canela. Sin embargo, no es el único dulce tradicional de esta zona. Compartidos con algunas poblaciones de los alrededores, como algunas alicantinas o de Albacete, los rollos de huevo —un tipo de rosquillas que se cocinan en el horno— son otro postre muy habitual en panaderías, pastelerías y muchas casas murcianas.

Se trata de una masa a la que se le da forma redondeada, con un agujero en medio. Y aunque muchos de estos dulces tipo rosquillas se hacen fritos, en este caso se hornean, lo que los convierte en una versión igualmente sabrosa pero bastante más ligera. Son un postre que suele ser típico de comer en fiestas patronales o Semana Santa, aunque en Murcia los rollos de huevo se hacen durante todo el año y son una opción ideal para una merienda en casa con la familia o los amigos y mojar en un buen tazón de leche, un chocolate a la taza, un café o incluso un té. Son perfectas para cualquier época del año.

Los ingredientes son naturales y muy básicos: harina de trigo, huevo, limón, azúcar y aceite de oliva virgen extra. Si quieres hacer unos rollos más saludables, siempre se puede reducir la cantidad de azúcar o endulzarlos de alguna otra manera.

Esta es la lista de ingredientes que necesitaremos para hacer estos rollos de huevo murcianos. Nos saldrán unas 25 unidades, dependiendo del tamaño que les demos. Para controlar las proporciones, no olvides que al hornearse la masa crece.

En poco más de una hora, tendrás listo en casa un postre tradicional, muy rico y con ingredientes naturales y que solemos tener todos en la despensa. Con todo lo necesario ya preparado, vamos a ponernos manos a la obra.

La receta de rollos de huevos murcianos

Esta preparación es bastante sencillla. No hace falta ser ningún experto en la cocina para preparar unos rollos perfectos y con un delicioso sabor. En cuanto al tiempo, en total necesitarás cerca de una hora: unos 30 minutos de preparación y otros 20 de horneado, aunque luego hay que dejarlos reposar 20 minutos más.

Lo primero que vamos a hacer es verter el azúcar en un bol amplio, al que añadiremos la ralladura del limón. Tiene que ser muy fina y evitar que caiga la parte blanca del fruto, para que no amargue. Una vez hayamos añadido toda la ralladura, vamos a mezclar bien con las manos ambos ingredientes, de forma que se liberen todos los aceites esenciales del limón y se impregne bien del aroma.

El siguiente paso es añadir tres de los huevos e ir batiendo con una batidora de varillas hasta que veamos que la mezcla ha subido lo suficiente; entonces iremos echando el aceite de oliva, sin dejar de batir poco a poco hasta que todo esté perfectamente integrado.

En otro bol mezclaremos la harina de trigo con el gasificante y echaremos la mitad de esta mezcla a la masa de azúcar con el limón y el huevo. Cuando esté todo bien mezclado, se añade la otra mitad. La masa tiene que quedar algo húmeda y nada pegajosa. Tapamos con papel de film transparente y dejamos reposar durante al menos media hora.

Pasado ese tiempo llega el momento de formar los rollos. Mientras, iremos precalentando el horno a 180 °C y preparando un par de bandejas con papel sulfurizado para que no se peguen los dulces.

Para formar los rollos, tomaremos porciones de masa de uno 40 gr. Puedes hacerlo de dos maneras, o bien haces bolitas, la aplastas un poco y les haces el agujero en la parte del medio, o bien formas cilindros y juntas ambas puntas. De forma paralela habremos batido el huevo restante, con el que pintaremos los rollos y para finalizar, espolvorearemos un poco de azúcar sobre cada uno de ellos.

El tiempo de horneado es corto, unos 15 o 20 minutos, pero te recomendamos que estés pendiente mientras se cocina para que no se quemen, sobre todo por la parte de abajo. Una vez estén listos, recuerda que hay que dejarlos enfriar unos 20 o 30 minutos más. Y una vez estén ya a temperatura ambiente, los tendrás listos para una rica merienda con el olor de los rollos todavía en el ambiente o puedes guardarlos en una caja metálica con cierre hermético.

Versión sin gluten

Si sigues una dieta sin gluten, también puedes disfrutar de este tipo de dulce sin que pierda esa textura esponjosa que lo caracteriza. Puedes sustituir, por ejemplo, harina de maíz o harina de garbanzo. Te damos una receta alternativa con un resultado similar al de los rollos, roscos o rosquillas.

Ingredientes:

El procedimiento es el mismo, pero utilizando la harina de garbanzo junto con la de maíz. La receta es igual de sencilla y el resultado, exquisito.