El barco Aquarius de la ONG SOS Méditerránee ha pasado este sábado frente a la isla de Mallorca en su séptimo día de navegación, tras el rescate de 630 inmigrantes en el mar, que serán desembarcados en España tras la negativa de Italia y Malta.
Los Ejecutivos español y francés han estado contacto en las últimas horas a través del embajador galo en Madrid, Yves Saint-Geours, que ha comunicado a la vicepresidenta Carmen Calvo que Francia está dispuesta a recibir a los migrantes del Aquarius que quieran dirigirse a dicho país.
Según una nota remitida por Presidencia del Gobierno, España ha aceptado la propuesta del Gobierno de Francia. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha enviado un telegrama de agradecimiento al presidente francés durante la tarde. “Este ofrecimiento demuestra que este es el marco de cooperación con el que Europa debe dar respuesta”, dice Sánchez. Finaliza expresando a Macron “su consideración y estima”.
La embarcación, con 106 inmigrantes a bordo, y las otras dos de la Marina italiana que la escoltan y que se reparten el resto de los 360 inmigrantes rescatados en el Mediterráneo navegan con un mar “finalmente” en calma, según ha indicado a Efe el cooperante Alessandro Porro.
En la mañana del sábado se ubicaban al norte de la isla balear de Mallorca y una nave militar española les ha dado “la bienvenida” a aguas de España, el país que acogerá a los inmigrantes náufragos después de que ni Italia ni Malta les ofrecieran un puerto seguro.
La ONG ha referido en las últimas horas que muchas de estas personas han sufrido mareos y la enfermedad del mar por las altas olas y el mal tiempo, lo que hizo a la nave desviarse y bordear la isla italiana de sicilia para refugiarse.
Un dispositivo de más de 2.300 personas
Un dispositivo de más de 2.300 personas será el encargado de ofrecer una primera atención, fundamentalmente sanitaria, a los migrantes del Aquarius a su llegada a España.
Los tres barcos en los que se ha repartido a estas personas llegarán de forma escalonada, previsiblemente a las 6:00, las 9:00 y las 12:00 horas, al Muelle Uno del Puerto de Valencia, y allí se les prestará una primera atención sanitaria.
Según ha informado el subdirector general de Emergencias de la Generalitat, Jorge Suárez, los migrantes bajarán en grupos de 20 personas para someterse a una primera valoración médica, aunque ha señalado que no se espera que haya “ninguna tipología sanitaria de especial gravedad”.
Suárez ha destacado que la voluntad es que los migrantes pasen en el puerto de Valencia el menor tiempo posible, y puedan ser trasladados de forma inmediata a los lugares de acogida previstos, que están preparados pero de los que no se informará para garantizar su intimidad.