El fabricante Fiat Chrysler Automobiles (FCA) negó hoy las acusaciones de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de EEUU de que trucó unos 104.000 vehículos para engañar en pruebas de emisiones de motores.
La compañía italo-estadounidense se declaró “decepcionada” por el anuncio de la EPA y manifestó su intención de “trabajar con el ”Gobierno entrante“ del presidente electo, Donald Trump para ”resolver este asunto de firma justa“, según un comunicado.
El anuncio de la EPA provocó una caída de las acciones de la empresa en Wall Street de más de un 13 %, y se produjo un día después de que las autoridades estadounidenses impusieran una multa de 4.300 millones de dólares a Volkswagen por el escándalo de los motores diésel trucados del fabricante alemán.