El fabricante japonés Nissan anunció hoy una inversión de hasta 60.000 millones de yuanes (9.500 millones de dólares, 7.600 millones de euros) a través de la filial conjunta que tiene con la compañía china Dongfeng Group en los próximos cinco años para llegar a ser el fabricante líder en China en 2022.
La filial, participada por estas dos empresas en un 50 %, tiene como objetivo vender 2,6 millones de vehículos al año en el país asiático para el año 2022, lo que supone un incremento respecto a las 1,52 millones de unidades que vendió el año pasado, publica hoy el diario financiero Caixin.
Si consigue estas cifras de ventas, sus ingresos ascenderían a 300.000 millones de yuanes (47.600 millones de dólares, 38.200 millones de euros).
Dongfeng introducirá más de veinte nuevos modelos de vehículos eléctricos en al país a través de todas sus marcas y espera que un 30 % del total de ventas en 2022 corresponda a este tipo de automóviles menos contaminantes.
La filial conjunta eGT New Energy Automotive fue creada en agosto de 2017 por la alianza formada por Renault y Nissan y el segundo grupo automovilístico chino, Dongfeng.
Según anunciaron entonces, el objetivo de constituir esa empresa era la creación de un nuevo vehículo eléctrico para el mercado chino, que se empezará a fabricar en 2019 y se desarrollará sobre la base de una plataforma de todoterreno deportivo (SUV) del segmento A de Renault-Nissan.
China matriculó en 2017 un total de 468.000 vehículos eléctricos, lo que supuso un aumento del 82,1 % respecto al total de estos automóviles vendidos en el año anterior.
A finales del año pasado las autoridades decidieron extender los incentivos fiscales para la compra de vehículos eléctricos e híbridos durante tres años, hasta diciembre de 2020, una medida que habían defendido los fabricantes para continuar incentivando ese mercado y que contribuirá al objetivo oficial de combatir la contaminación en el país.