El Juzgado de lo Penal número 1 de Vitoria-Gasteiz ha condenado a dos años y tres meses de prisión al arqueólogo Eliseo Gil por un delito continuado de estafa y un delito continuado de falsedad documental por el caso de los falsos hallazgos supuestamente revolucionarios en el yacimiento de Iruña-Veleia (Álava)
La sentencia también condena a Ruben Cerdán, el supuesto físico nuclear que elaboró los informes que avalaban la presunta autenticidad de los hallazgos, a un año y tres meses de cárcel por un delito continuado de estafa en concurso con un delito de falsedad documental.
El Juzgado de lo Penal número 1 de Vitoria subraya en su sentencia que Gil, director de los trabajos en el yacimiento de Iruña Veleia en el momento de los hechos, se concertó con Cerdán para conferir a las piezas arqueológicas encontradas entre 2005 y 2006 -que contenían inscripciones supuestamente revolucionarias sobre el euskera y la historia del cristianismo en la Península Ibérica- una autenticidad “que no tenían”.
(Habrá ampliación)