Los hechos han ocurrido a las diez de la noche de este lunes, cuando una vecina llamó a la Ertzaintza para advertir de los hechos. La mujer, que tenía las llaves del inmueble porque sus propietarios estaban de vacaciones, se encontró en un dormitorio el cadáver del hijo del matrimonio, de 42 años de edad, que podría haber sufrido asfixia por inhalación de humo.
El incendio se había producido en la cocina del domicilio, ubicado en la calle Julián Gayarre de Sestao, pero el fuego se encontraba ya apagado.