El Caja Rioja rompe su buena racha
NAVARRA - CAJA RIOJA, 77-64
El Caja Rioja perdió en Pamplona la cuarta posición que hasta ahora ocupaba en la tabla. En un excelente partido del HNV Duar, los navarros se llevaron la victoria y suman así su quinto triunfo consecutivo en la que ya es su mejor racha de la historia. De la mano de José María Urabayen, los navarros han conseguido convertir su pabellón en un fortín donde los rivales tienen que sufrir mucho si quieren llegar al final del partido con opciones.
Los riojanos lo intentaron y no le perdieron la cara al partido nunca, aunque siempre fueron a remolque en el marcador. Probablemente, de haberse tratado de otro rival el HNV Duar hubiese conseguido un resultado mucho más abultado.
En un primer cuarto pleno de intensidad por ambos lados, el HNV Duar consiguió tomar una ligera ventaja sobre la que cimentó después su victoria. Con una buena defensa, su mejor virtud durante toda la temporada, los navarros frenaron el ímpetu del Caja Rioja. El técnico local cambió el planteamiento de salida y colocó a dos postes bajos, algo muy inusual. La estrategia le dio resultado y al término del primer cuarto, los navarros ya ganaban por cinco puntos (22-17).
En el segundo, los riojanos tuvieron que sufrir todavía más.
El equipo navarro completó sus mejores minutos como local para incrementar su renta. El trabajo de Cage y Aramburu bajo el aro y el acierto desde la línea de 6,25 de Ott y Sanz convirtieron al HNV Duar en una máquina imparable. De hecho, el Caja Rioja mejoró sus números anotadores del primer cuarto, pero la diferencia se disparó hasta los 14 puntos (50-36). Smith se echó a su equipo a la espalda, pero sirvió de poco porque los visitantes no conseguían poner freno a las llegadas del HNV Duar, que anotaba en penetración, desde dentro y desde fuera.
Para ese momento, el partido se había convertido en un toma y daca de canastas con un ritmo frenético. Ninguno de los dos equipos fue rácano y ambos se volcaron siempre al ataque.
Sin embargo, tras el descanso el partido cambió de escenario. En el tercer cuarto los riojanos supieron parar mucho mejor a los hombres interiores del HNV, Cage y Aramburu. Los dos, piezas fundamentales durante los dos primeros cuartos, tuvieron muchísimos problemas para anotar. Así que los navarros se vieron forzados a lanzar desde fuera o en malas posiciones. Así se explica que sólo lograsen 9 puntos en todo el cuarto frente a la media de 25 que llevaban hasta entonces.
El Caja Rioja aprovechó la ocasión para recortar distancias, pero no lo suficiente. Sabedores de sus problemas en ataque, los de Urabayen se replegaron bien y se emplearon en defensa para evitar los pases interiores de los visitantes. El atasco, por tanto, fue evidente. Sólo 14 puntos anotó el equipo riojano en este cuarto (59-50).El partido llegó vivo al último cuarto aunque con claro color local. Los navarros, además, se encargaron pronto de desanimar a sus rivales.
Con un par de triples anotados por Iñaki Narros e Iñaki Sanz, el HNV Duar aumentó su ventaja hasta los 15 puntos en apenas cuatro minutos, la máxima renta del partido (69-54). Ahí se murió el partido porque, aunque los locales bajaron su intensidad, los riojanos dieron por imposible la remontada. Una sucesión de canastas falladas, tiros libres errados y malos pases puso un feo colofón a un buen partido del baloncesto al que le faltó desde el principio lo fundamental, la incertidumbre por el resultado.
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