Fin de fiestas de San Mateo: La cuba no arde por la emergencia climática

El cohete vespertino sorprendió a los logroñeses y dividió entre los que preferían a las 12.00 horas, como ocurría tradicionalmente, y los que no les importaba cambiar. Si con un cambio empezaron las fiestas con otro han terminado: la cuba ha sido indultada y no ha ardido. Esta decisión se ha debido a la Huelga Mundial por el Clima que ha llenado el planeta de manifestaciones por la emergencia climática.

Una semana después de que el cohete explotara en el cielo y comenzaron las fiestas de San Mateo. La misma Plaza del Ayuntamiento ha vuelto ha llenarse con todos los miembros de las peñas y cientos de logroñeses para cerrar las fiestas de San Mateo. El público esperaba que las llamas terminaran los días festivos y, al enterarse que este año no habría llamas, han comenzado a pitar, a gritar “Fuera” y a pedir al alcalde: “¡Quema la cuba!”.

El alcalde, al que los pitos han interrumpido, ha explicado que “queremos que la quema de la cuba no represente contaminación. Hoy es un día importante, donde la ciudad de Logroño demostrará que se puede hacer una quema de la cuba sin quemar todo ese poliespan y sin ensuciar. Por eso, la cuba va a ser indultada”.

Los pitos han parado cuando los vendimiadores, visiblemente emocionados, ha leído su despedida de las fiestas. “Hace una semana estábamos ahí, en ese balcón del Ayuntamiento en el que lo que sientes es tan indescriptible como increíble”, ha dicho Cristian sin poder contener las lágrimas. Noelia ha agradecido “a vosotras y vosotros, logroñeses, que no solo nos habéis dado momentos únicos sino que nos habéis hecho amar más a nuestra ciudad y a sus buenas gentes”. También han dado las gracias a las peñas, “Qué grandes sois, majos”, a las casas regionales, a las asociaciones de vecinos, a la Corporación Municipal “por la elegancia con la que nos habéis tratado”.

Después, entre pitos y gritos, el alcalde ha encendido la mecha de un espectáculo pirotécnico preparado alrededor de la cuba. Al terminar, han continuado los abucheos e incluso el alcalde ha tenido que salir de la plaza con la Policía Local y ha entrado al Ayuntamiento. Los peñistas se han quejado de la toma de decisiones de última hora y un grupo de ello se ha quedado esperando al alcalde en la puerta del Ayuntamiento.