Los líderes sindicales riojanos creen que la tasa de paro no ha tocado fondo

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El sábado es el Día Internacional del Trabajo ¿Qué valor tiene en la situación económica en la que estamos?

J.G.: Tiene que suponer un reforzamiento de nuestras posiciones sindicales frente a las dificultades que está atravesando el país y especialmente nuestra región. Hay que decir que hay un alto grado de precariedad en todo el ámbito laboral de nuestra región, más de 23.400 parados, un sector industrial que no termina de tirar de la economía, que cada día hay más jóvenes que pasan a engrosar las filas del paro, que hay una mayor interinidad en el empleo y que la economía sumergida está en su máximo esplendor, con un cifra estimativa de 2.436 millones de euros en nuestra región. Por tanto, este primero de mayo toma un mayor valor y compromiso entre los trabajadores y las organizaciones sindicales para salir de esta situación.

K.G.:Cobra aún mayor importancia, por ejemplo, sabemos que en esta crisis económica las prioridades de las empresas no está en la inversión en las medidas de prevención. Podría parecer contradictorio tras los últimos datos que se han dado por parte de la Directora General de Trabajo de La Rioja pero CC.OO está detectando, y hemos ganado cinco demandas en la Jurisdicción de lo Social (…) Por lo tanto, no es oro todo lo que reluce, hay que seguir insistiendo en la seguridad. El La Rioja el 90 % son pymes con menos de 10 trabajadores y las que no llegan a 6 trabajadores ni siquiera tienen representación sindical, donde hay sindicato (CC.OO-UGT) hay una responsabilidad y una presión en positivo para que se cumplan las normas. (Caso Baños) Hoy podemos decir que una muerte, una imprudencia por incumplimiento de riesgos con resultado de muerte cuesta en La Rioja 8.760 euros, estas personas no van a prisión y desde el 2003 CC.OO ha estado personado con la familia... y tenemos que lamentar una sentencia injusta.

Los datos de la EPA revelan que en el primer trimestre de 2010 la tasa de paro supera por primera vez desde 2007 el 20% ¿Cuál es su valoración?

J.G.: Muy negativa, no solamente al nivel del país. En el caso de La Rioja vamos a superar el 15% de esa tasa de desempleo, lo que pone de manifiesto que las medidas que entre todos tratamos de poner en marcha para que la situación salga adelante no están siendo objeto de un resultado adecuado. Nosotros seguimos reclamando que a pesar de la situación económica que tiene el país y nuestra región, es necesario que los presupuestos generales se destinen a mantener la situación económica social para evitar que la crisis la sigamos pagando los trabajadores.

K.G.: Desgraciadamente con nuestros barómetros de estudios ya habíamos anunciado que podríamos llegar a rozar los cinco millones de parados. ¿Por qué? Porque el Gobierno reaccionó tarde, no reconociendo la que se nos venía encima. Por lo cual, ya llegamos tarde en una serie de medidas que algunas se están tomando, otras son flojas... Y luego nos encontramos con la poca disposición de la oposición para hacer un Pacto de Estado. El paro va a continuar todavía un tiempo en ese porcentaje del 20 por ciento, porque si no hay una creación neta de empleo. Llamentablemente va a seguir habiendo mucho desempleo y la obligación del Gobierno Central y el de La Rioja va a ser que no decaigan las prestaciones sociales, ya hay muchos riojanos que han agotado las presentaciones ...

¿Cree como Zapatero, que la tasa de paro ha tocado fondo y que bajará desde abril?

J.G.: Nosotros creemos que no. Lamentablemente no hemos conseguido entre todos que haya tocado fondo el desempleo. Por tanto creo que es necesario que políticas públicas económicas reactiven la economía de nuestro país. En La Rioja quiero recordar que el 94% de los Expedientes de Regulación de Empleo han contado con nuestra negociación. Por el momento hemos logrado que no cierren y en algunos casos están remontando. Han sido mínimos los casos de empresas que después de un Expediente de Regulación de Empleo temporal han cerrado.

K.G.: En este tipo de pronósticos no puedo estar de acuerdo, es probable que nos mantengamos en esta tasa ¡que más quisiéramos bajar! Pero evidentemente el presidente del Gobierno ha presentado poca credibilidad porque ha hecho muchos anuncios en este aspecto, es posible que hayamos tocado fondo pero tenemos 4,6 millones de parados y si no hay una fuerte creación de empleo con signos positivos se bloquea la contratación. Porque si la empresa tienes pedidos, tienen actividad de contratar y no tienen ningún problema en hacerlo.

¿Considera que La Rioja está en una posición mejor que la media nacional?

J.G.: Incluso cuando la economía estaba bien estábamos en una situación mejor, aunque hay que

decir que hemos avanzado más deprisa. El desempleo está por encima del 15% y algunos índices son peores que otras comunidades autónomas, por ejemplo el tiempo que les cuesta encontrar un empleo a los trabajadores jóvenes. O las cifras de la economía sumergida, que somos los que más hemos crecido en todo el país.

K.G.: La Rioja tiene un diferencial respecto al resto de España, pero en la jornada que hemos hecho -recientemente- sobre servicios sociales apunta que en la Comunidad los datos de índice de pobreza están en la media española con el 20%, mientras otras comunidades como Navarra están en un siete. ¿Por qué? La razón fundamental es que los salarios están por debajo de muchas de las Comunidades de España y eso explica hasta qué punto está por debajo del umbral de la pobreza, esto es engañoso y por lo tanto hay un empobrecimiento en La Rioja. Las partidas económicas para situaciones complicadas son bajos respecto a otras comunidades, hay una gran desigualdad, nos estamos preocupando por el tema del Blindaje cuando sin embargo en La Rioja tenemos los salarios sociales y de insercción más bajos de nuestros vecinos.

El Ministerio de Trabajo entregó a los sindicatos y empresarios un nuevo documento de reforma laboral que se debatirá a mediados de mayo...El Ejecutivo propone tres fórmulas: 1) Bajar el coste de las indemnizaciones por causas económicas y disciplinarias; 2) Subvencionar desde Fogasa la parte que ha de pagar la empresa y 3) Hacer universal el contrato de fomento de empleo, que rebaja la indemnización de 45 a 33 días por año trabajado ¿Qué opción le parece menos mala?

J.G.: Yo creo que tampoco es momento de avanzar posiciones en relación con la negociación porque es una negociación complicada que afecta a cientos de miles de trabajadores y hay que actuar con cierta cautela. Yo quiero ser prudente y tratar de que en la mesa de negociación se lleguen a los mayores acuerdos posibles. Las cosas pueden cambiar de la noche a la mañana en relación con las posiciones que yo pueda avanzar.

K.G.: Nosotros directamente planteamos que de ninguna manera se puede universalizar el contrato a los 33 días, hemos dicho que tiene que haber un contrato 'tipo' con derechos y con una indemnización de 45 días. Porque la mayoría de los despidos han sido despidos improcedentes y la media de pago, teniendo en cuanto las situaciones, no superan los 20 días. Hay trabajadores que pactan por debajo, no se atreven, no demandan, no reclaman... Por lo tanto estamos de acuerdo en la reducción de jornada de trabajo, para no despedir a tanta gente (...) No queremos el abaratamiento de los costes de despidos, pero estamos dispuestos a la flexibilidad interna, reducir los puestos de trabajo, movilidad en la empresa de acuerdo a los comités de empresa. Con sensatez, para que el empresario no organice la empresa como le de la gana.

¿Cree que el Ejecutivo está hablando por primera vez de abaratar el despido?

J.G.: Su compromiso es que no. Por lo tanto, a ese asidero nos hemos agarrado porque además coincide con nuestras posiciones, claramente contrarias a lo que viene manifestando por ejemplo el gobernador del Banco de España, que permanentemente está hablando de bajos salarios, de reducir la indemnización por despido, de más precariedad en el empleo, que precisamente son recetas que nos ha llevado a esta situación. No sé qué acuerdo se va a producir pero, desde luego, lo que no vamos a aceptar es que se planteen reducción de derechos de los trabajadores. Aunque estamos convencidos de que hay que hacer esfuerzos, no nos vamos a bajar los pantalones.

K.G: Realmente ha planteado la reducción de los 33 días y que los empresarios paguen el 25 por ciento, eso es un simple y llanamente abaratamiento del despido. Nosotros en ese camino nos hemos negado en redondo, además animadamente. Esto no va a crear empleo si la empresa 'A' tiene 'X' trabajadores y ha tenido que hacer un ERE, no tiene actividad por lo tanto no va a tener que contratar.

¿No cree que cualquiera de estas tres opciones dan un paso atrás en lo que se ha conseguido respecto a los derechos del trabajador?

J.G.: No sé en qué clave se va a producir el acuerdo, pero nosotros no estaríamos en esa línea de que se redujeran las indemnizaciones por despido. Ya se han abierto las puertas del despido a cientos de miles de trabajadores y si finalmente facilitamos esos despidos, las empresas van a optar por esa vía. Las empresas tienen que asumir su responsabilidad también en la parte que les corresponde. Han tenido durante más de 10 años beneficios importantísimos que lógicamente tienen que reinvertir para mantener las empresas y seguir adelante. De todas formas, un abaratamiento del despido no va a generar más empleo.

K.G: El problema que estamos teniendo es que los empresarios están viendo como una oportunidad la crisis para rebajar derechos, por otro lado hay una enorme presión mediática dirigida a los sindicatos diciendo que 'son obsoletos' o 'no vivimos en la realidad de hoy'. Y nosotros sí vivimos en la realidad de hoy, y no estamos dispuestos a un modelo de contratación en precario, estamos dispuestos a ser flexibles y sensatos en la mesa de negociación para que sobre los acuerdos de hoy sepamos construir un modelo productivo basado en la formación, derechos y cualificación de los trabajadores. Y que nos centremos a hacer productos de valor añadido porque la producción de productos en serie que se producen en masa ya se encargan en Asia.

Dijeron que acudirían a la huelga general cuando se vulneraran los derechos de los trabajadores... ¿Considera que todavía no ha llegado ese momento?

J.G.: Todavía no. Estamos sentados en la mesa de negociación. Incluso creo que es perjudicial que aireemos este asunto ahora mismo. Vamos a dejar que la negociación llegue a su fin para posteriormente hacer las valoraciones. Nosotros hemos hecho una apuesta muy seria por la negociación, hemos llegado a un acuerdo con los empresarios de cara a la negociación colectiva del 2010, 2011 y 2012 con unos incrementos salariales muy limitados. Hemos hecho un esfuerzo y ahora corresponde a las otras partes, empresarios y Gobierno, hacer esfuerzos para que finalmente el acuerdo sea posible.

K.G: Organizaciones muy a la izquierda y no tanto como IU nos están llamando a la huelga, pero hacemos ahora la huelga ¿Y mañana qué?. Hemos ido a diferentes movilizaciones (...) si este Gobierno o el que venga toca los derechos de los trabajadores de una manera agresiva, evidentemente habrá una huelga general y así lo ha manifestado nuestro propio secretario general.

¿Cree que la gente está desbordada por las circunstancias y no reivindica sus derechos?

J.G.: Efectivamente la gente está asustada. La gente ve que en el edificio de su casa hay muchas familias que están en el desempleo y en muchos casos, más de 6.000 en La Rioja, sin ningún tipo de ingreso. La gente tiene mucha precaución a la hora de tomar decisiones. No obstante, aquí en La Rioja, hemos tenido una respuesta muy positiva en las movilizaciones que hemos hecho. La última con la idea del Gobierno de incrementar la edad de jubilación.

K.G: En Comisiones hay dos vertientes, las personas que conocen que es un sindicato de clase, que conocen el trabajo de la asociación, y luego está la vertiente práctica. Nosotros estamos saturados con colas de gente todos los días en el sindicato, nuestros servicios jurídicos con 5 abogados, salud laboral (...) Estamos trabajando a tope, hay mucha conflictividad que tienen que ver con los despidos, ERES y la negociacicón colectiva en La Rioja.

¿Considera que la gente sigue confiando en el movimiento sindical?

J.G.: Estoy convencido de que sí. Nosotros en el sindicato estamos creciendo en afiliación, recibimos cientos de miles de consultas todos los meses para tratar de resolver los problemas de los trabajadores y el simple hecho de recurrir a nuestra organización sindical es un signo de confianza. Tenemos afiliados más de 15.400 trabajadores en nuestra región y somos la primera fuerza sindical con más de 1.500 delegados en las empresas de La Rioja.

K.G: En el último año hemos tenido un 2% de subida de afiliación, no nos confundamos, que otras organizaciones han dado cifras que se escapan de la realidad. Hay que tener en cuanta que hay muchos 'afiliados exentos', que son los que se han quedado en paro y que a veces no pueden pagar la cuota. Nosotros estamos haciendo un esfuerzo para que el afiliado exento le eximimos de la cuota porque él quiere seguir su relación con el sindicato y nosotros queremos prestarle un servicio. Por lo tanto hay sensibilidad, el boca a boca de las empresa se sigue considerando a los sindicatos, otras cosa son las editoriales que hablen de la labor económica de los mismos.

Cada vez hay mayor número de parados y por tanto mayor cantidad de prestaciones por desempleo, y se está ampliando la prestación para los desempleados sin ningún ingreso. ¿No cree que llegará un momento en que no haya dinero para prestaciones por desempleo?

J.G.: Nuestra economía a nivel general no es que sea de las más boyantes pero está claramente saneada. Hace unos días hemos visto como de manera rápida, en cuestión de horas, se ha decidido subvencionar a las compañías aéreas que no han podido volar por el problema que ha habido con el volcán. Por tanto, dinero lo hay y la prioridad es mantener las prestaciones a los trabajadores. Yo creo que los estados, las comunidades, los ayuntamientos, las organizaciones sindicales y empresariales tenemos la capacidad suficiente para ponernos de acuerdo y tratar de resolver la situación antes de que llegue el momento en que no haya dinero para prestaciones.

K.G: Hoy ya tenemos un problema presupuestario en La Rioja, sabemos que el nivel de endeudamiento del Gobierno regional es muy alto, y que van a bajar aquellas partidas que tengan que ver con las políticas sociales. Nosotros decimos “oiga, que no sólo no las tiene que bajar, es que las tiene que subir, es que nos pasamos de 22.000 parados y hay familias que no tienen ningún tipo de ingresos y es que el salario mínimo de inserción que hay en La Rioja es muy bajo. Que el índice de pobreza en La Rioja ha subido y estamos en el 20 por ciento, que seguimos teniendo más parados. Y resulta que tanto entre la renta de inserción como la otra ayuda no se han llegado a gastar el año pasado 2 millones de euros. Encima el salario mínimos resulta que hay un tope, a partir de una cantidad de dinero 370 euros da igual los hijos que tengas, porque no tienes más y eso se convierte en un drama para muchas familias que no tienen ingresos” eso es lo que estamos diciendo. Por lo tanto, hay problemas en las administraciones locales, en el Ayuntamiento de Logroño, en otros ayuntamientos y en el Gobierno de La Rioja están intentando ayudar a los parados, por hace falta presupuesto para que no haya una ruptura de las redes sociales, y ya tenemos un 20 por ciento de personas en el índice de la pobreza... Y ¿si hay una ruptura en los presupuestos? Habrá durante un tiempo que mantener un déficit, y nosotros estamos diciendo que llegar en 2012 al objetivo del déficit no va a ser posible, porque hay que atender a muchas personas que han sido expulsadas del mercado laboral y que han sido expulsadas del mercado del consumo, de la actividad económica al fin y al cabo.

También afecta al presente y futuro de los trabajadores. Después del debate que ha habido respecto a retrasar la edad de jubilación ¿Cree que llegará el momento en que se acabe el dinero para las pensiones?

J.G.: La idea de dinamitar el sistema público de pensiones en nuestro país no es nada nuevo. La gran banca, los especuladores de ámbito internacional tienen interés en que los trabajadores se paguen de su bolsillo, que ya lo hacemos porque nuestro plan de pensiones es contributivo, pero prefieren que se conserve en sus bancos que en el ámbito de la Seguridad Social.

K.G.: El punto de vista es que en primer lugar, tenemos un sólido fondo de reserva, mermado, estamos hablando que tiene que haber una separación financiera, estructura y dotaciones económicas para las prestaciones a parte, no estamos mal. Evidentemente hay que hacer proyecciones a largo plazo pero eso lo vamos a discutir en mayo en el entorno del Pacto de Toledo. Ahora, lo que no se puede hacer es lanzar ondas, hablar de que se va a elevar a 67 años y ¿Cuándo van a entrar a trabajar los jóvenes? Realmente, nuestro sistema soporta la actual media de jubilación, y más teniendo en cuanta que en los últimos años ha subido la media. Hace unos años CC.OO inscribió al tema de la jubilación voluntaria a los 61 años, por lo tanto hay todavía bastante cosas que hacer.

Y ¿cuál sería la solución? De seguir así, dentro de 30 años no habrá tantos jóvenes trabajando como para pagar la pensión de los mayores.

J.G.: No sólo en el tema de las pensiones. En 2013 seremos contribuyentes netos en Europa. Eso quiere decir que no vamos a recibir de Europa dinero para mejorar nuestras infraestructuras o para dedicarlo a la formación o para lo que se considere oportuno. ¿Qué va a ocurrir? Que nuestro país se va a parar. Pues no. Nosotros no nos presentamos a las elecciones y por tanto lo vamos a decir con toda claridad. Va a ser necesario que se suban los impuestos y que haya una política impositiva distinta para que pague más quién más gana, para que se recaude mayor dinero, continúen manteniéndose las inversiones en nuestro país en infraestructuras, continúe habiendo fondos de pensiones, sanidad y educación a la altura de las circunstancias.

K.G. : La ampliación a 67 la rechazamos contundentemente, hicimos la movilización de diciembre y hoy no hemos cambiado nuestras posiciones ni un solo milímetro. Aunque evidentemente habrá que hablar de financiación, de viabilidad y lo haremos en los Pacto de Toledo, pero hoy por hoy no es una cuestión urgente.