El posible cierre de dos fábricas de CMP Automotive en La Rioja pone en peligro más de 200 empleos, la mitad de personas con discapacidad

El anuncio de entrada de concurso de acreedores y posible cierre en agosto de dos fábricas de la industria auxiliar de la automoción del grupo CMP Automotive está poniendo en peligro más de 200 empleos en La Rioja. Los trabajadores de los dos centros de trabajo han convocado huelgas ante la “incertidumbre y falta de información” que están atravesando.

La primera fábrica en convocar huelga indefinida ha sido CMP Automotive Serling, la antigua Perteca, donde trabajan unas 100 personas. Ante la pérdida del principal cliente de la planta, el grupo Volkswagen, con quien acaba el acuerdo el 31 de agosto, les anunciaron la entrada en concurso de acreedores. “La empresa no habla de cierre explícitamente pero están desmontando máquinas”, advierten desde los sindicatos.

No obstante, ante el reciente nombramiento del administrador concursal, los trabajadores le han dado tiempo para analizar la situación y no están secundando la huelga hasta el próximo 16 de junio cuando vuelvan a reunirse. Exigen un plan de viabilidad para conocer el futuro o incentivos para que los trabajadores acudan al puesto de trabajo a pesar de la previsión de cierre.

La incertidumbre es todavía mayor en CMP Automotive Handling, un centro especial de empleo donde trabajan más de un centenar de personas con discapacidad. En su caso, la empresa todavía no ha presentado concurso de acreedores y no hay administrador concursal nombrado, pero “sigue el camino de Serling y todo apunta a despidos colectivos inminentes”, advierten desde CCOO, “que además en este caso son de personas de especial vulnerabilidad”, a quienes hasta el momento no se les ha ofrecido ninguna alternativa.

También han seguido a la otra planta del grupo en la conovocatoria de huelga, que iniciarán el próximo 16 de junio, mientras denuncian “falta de transparencia” y que “la empresa no ha ofrecido soluciones reales ni salidas dignas”. Desde CCOO confirman un clima “de angustia e inestabilidad insoportable” en la plantilla y dudan incluso de que los despedidos colectivos no lleguen antes de agosto.

Mientras tanto, el Gobierno de La Rioja no se ha reunido con ninguno de los comités de empresa de estas dos empresas que se enfrentan al despido de más de 200 personas. Después de retrasos previos en las nóminas y algunas alarmas, en CMP Automotive Serling si se reunieron con miembros de la Consejería de Empresa, sin la consejera, a principios de abril, pero desde el anuncio del concurso de acreedores no han recibido ningún contacto por parte del ejecutivo. Tampoco han hablado con el centro especial de empleo del grupo, cuyo comité de empresa avanza que van a intentar hacerlo ellos para reclamar que el Gobierno medie en esta situación que afecta de forma importante al tejido industrial y laboral de la región.