Asier Salcedo es un media punta con gol. Lo había demostrado de sobra en sus anteriores campañas, como por ejemplo el año pasado en la Ponferradina, donde consiguió diez goles. Pero su llegada a Logroño ha venido acompañada por una racha tan negativa como la del resto de jugadores del colista. Suyas han sido muchas de las buenas oportunidades del equipo (“he pegado ya tres palos en lo poco que llevamos de campaña”, recuerda), pero hasta el domingo no se estrenó.
El suyo ante el Real Unión fue un tanto deseado. Por equipo y por afición. No en vano, el Logroñés CF aún no había conseguido estrenarse en Las Gaunas; sus aficionados no sabían lo que eran gritar “gol” este año. Pero, ante el remate de libro (de cabeza, de espaldas hacia la portería y tocando ligeramente hacia atrás para desarmar a Otermin) del jugador vitoriano, la afición reaccionó como si fuera el gol que daba un título.
Tanto entusiasmo no era para menos y Salcedo reconoce que “estoy muy contento por haber marcado, pero triste porque nos quedamos sin la victoria”. “Nadie en el vestuario había pasado una racha igual”, asegura el rojiblanco, “yo había estado un par de jornadas sin ganar, incluso más, pero no doce partidos”. Una racha de mala suerte y otros factores que mantiene al equipo en situación preocupante: colista y ya a seis puntos de la salvación.
Salcedo mantiene que “en cuanto logremos la primera victoria, nos vamos a ir hacia arriba”, porque “lo que nos pasa no es normal”. “Hemos jugado bien ante equipos de arriba, excepto el día del Guijuelo, que fue nuestro peor partido”, confiesa. Eso sí, lo que parece alta es la moral: “El día ante la Cultural Leonesa su gol nos hizo mucho daño y nos vinimos abajo, pero ya dijimos que era algo que no podía volver a pasar y en los dos últimos encuentros hemos remontado marcadores adversos”.
Falta aún el triunfo, algo que añade ansiedad al equipo, aunque Salcedo asegura que “el vestuario está unido, muy fuerte” y que “por fin se ven los frutos de la estrategia, que llevamos trabajando desde pretemporada y que hasta ahora no se había notado”. “Sabemos los errores que cometemos y trabajamos para que no se repitan, el triunfo llegará”, asegura el jugador vasco.