A finales del pasado mes de agosto, la Junta de Centro anunció la colocación de 15 baños portátiles en diferentes puntos del distrito, cinco de ellos en Malasaña. La decisión llegaba después de constatar el elevado nivel de uso que tuvieron estos elementos el verano pasado, cuando se llegaron a contar hasta mil usos por semana en cada WC.
Los servicios químicos se distribuyeron en las calles Farmacia y Palma y en las plazas del Dos de Mayo, San Ildefonso y Luna (Santa María Soledad Torres Acosta). El Ayuntamiento explicó en su momento que los colocaba para complementar los baños fijos instalados en 2017, para que su uso ayudara a evitar “los malos olores y suciedades”.
Una semana después de su instalación, las madres y padres que acompañaban a sus hijos en la vuelta al cole se encontraron el WC portátil del Dos de Mayo colocado junto a la entrada del colegio público Pi i Margall, una localización que se calificó de “desafortunada” y que provocó una lluvia de quejas por parte del centro escolar y de sus familias. Atendiendo a las reclamaciones, el baño se movió en una semana a otras dos localizaciones, primero junto a la fuente de agua potable y después hacia el centro de la plaza.
El pasado lunes, Somos Malasaña publicaba una carta del Ampa del Pi i Margall en la que denunciaba la falta de higiene en la plaza del Dos de Mayo y arremetía contra la colocación del baño portátil, en un lugar donde ya existe otro baño público de obra: “Nos hemos encontrado una plaza completamente deteriorada, sucia, y que pareciera que el verano inexplicablemente la haya llevado a la total decadencia”, decían en ella.
Y continuaban: “Por otra parte el primer día de colegio nos encontramos en la misma puerta un baño químico. Entendemos que ha sido colocado allí para evitar el olor nauseabundo que sale de las obras, pero quienes han decidido hacerlo no saben que en cambio ha invadido de malos olores la misma entrada al colegio. Hemos solicitado que lo quiten (...) entendemos que con la intención de desinfectar, aparece inundado de un químico de color azul, con lo que se mezcla el intenso olor a orín que ya inunda toda la plaza con quien sabe qué producto”.
El Ayuntamiento procedió este miércoles a retirar el WC portátil, además de practicar una limpieza intensiva de la plaza durante las mañanas de esta semana. El uso del foso en estos últimos días y noches de verano está resultando especialmente intenso por el buen tiempo y la ausencia de lluvias. Los existentes en la calle Palma o en la plaza San Ildefonso continuarán instalados, de momento, en sus actuales ubicaciones.
“#Measaña no es trending topic”
Junto con la instalación de los portátiles, la Junta de Centro anunció que desarrollaría una campaña de sensibilización en todo el distrito, con mensajes específicos para cada barrio. Para Malasaña el lema será “#Measaña no es trending topic”, mientras que el resto de frases son: “Barrio de Las Letras, no de las letrinas”, “Chueca no es una charca”, “En La Latina no se patina” y “Lavapiés sí, Lavapís no”.
Todos estos mensajes estarán acompañados de otros como “Sin malos olores. Sin estropear la calle. Sin molestar a los vecinos.” y señalizan los baños instalados con un “Aquí sí” y los espacios públicos a preservar con “Aquí no”.
La campaña será complementaria de la que ya se está ejerciendo contra el ruido, que con el lema Salimos sin molestar comenzó en toda la ciudad justo antes del verano.