Mientras que comunidades como Extremadura o Galicia han superado en más de siete puntos la participación de hace cuatro años, Euskadi y Catalunya han visto bajar la participación en más de tres puntos con respecto a 2019.
En Catalunya se ha registrado la participación de un 36,77% del electorado, hasta 3,8 puntos menos que en las últimas elecciones generales.
En Euskadi la caída es similar. Allí ha participado el 37,17% de los votantes, un 2,98% menos que en 2019.
También ha bajado la participación en Melilla, aunque el descenso ha sido de apenas un 1,32% con respecto a las generales de hace cuatro años.