La sesión constitutiva del Parlamento andaluz de la décima legislatura ha comenzado a las 12.02 horas sin que los grupos de la Cámara hayan alcanzado un acuerdo institucional, por lo que cada uno de ellos propondrá a sus propios candidatos para la composición de la Mesa.
La nueva legislatura arranca condicionada por la pluralidad, al pasar de tres a cinco partidos, y por la necesidad de pactos que garanticen al PSOE la estabilidad que su líder, Susana Díaz, buscaba cuando adelantó las pasadas elecciones.
La primera prueba de esta nueva cultura de pactos ha fracasado y la Mesa del Parlamento, órgano de gobierno del poder legislativo, se constituirá sin acuerdo.
La Mesa del Parlamento está compuesta por siete miembros (presidencia, tres vicepresidencias y tres secretarías), pero el Reglamento otorga a cada grupo un representante como mínimo, reparto que satisface a Podemos, Ciudadanos e IU.
Al no haber acuerdo, los grupos presentarán sus candidatos a dichos cargos y el presidente tendrá que ser elegido por mayoría absoluta o por mayoría simple en una votación posterior entre los dos aspirantes que tengan más apoyos.
La sesión ha comenzado con la conformación de la tradicional Mesa de Edad, integrada por Luis Pizarro (PSOE), el diputado electo con más edad en la Cámara, que ejerce la función de presidente, y por los dos diputados más jóvenes, María Márquez y José Latorre, también socialistas, que ejercen de secretarios.
A diferencia de la anterior, la décima legislatura de la Cámara autonómica ofrece la novedad de que los líderes de los cinco partidos representados tienen escaño.
La Cámara legislativa andaluza (109 escaños) mantiene el equilibrio de sexos (55 hombres y 54 mujeres). El PSOE renueva a más de la mitad de su grupo parlamentario, ya que son nuevos 27 de sus 47 integrantes, mientras que el PP-A sólo introduce un tercio de diputados noveles, 11 de sus 33 miembros.
Tanto los quince diputados de Podemos como los nueve de Ciudadanos estrenarán escaños, mientras que IU, además de su coordinador general, Antonio Maíllo, incorpora a la exconsejera de Fomento y Vivienda Elena Cortés entre sus cinco diputados.
El PSOE y el PP continuaron esta mañana con las negociaciones para tratar de lograr un acuerdo in extremis sobre la composición de la Mesa de la Cámara, lo que finalmente no ha sido posible.
Los populares consideran que deben tener dos miembros en la Mesa, mientras que el PSOE entiende que les corresponde solo uno.
El reglamento del Parlamento estipula que en las votaciones de las tres vicepresidencias y de las tres secretarías de la Mesa de la Cámara los elegidos serán los tres diputados con más votos, aunque también recoge que todos los grupos deberán estar representados (PSOE, PP, Podemos, Ciudadanos e IU) y la Mesa está compuesta por siete miembros.
El PSOE propondrá a Juan Pablo Durán, secretario general del PSOE de Córdoba, como candidato a la Presidencia de la Cámara; a Teresa Jiménez, secretaria general del PSOE de Granada, como vicepresidenta, y a Verónica Pérez, dirigente de los socialistas sevillanos, como secretaria de la Mesa, han indicado a Efe fuentes socialistas.
Por su parte, el PP propondrá a Manuel Andrés González, presidente provincial del partido en Huelva, como candidato a la Presidencia de la Cámara; a la malagueña Esperanza Oña como vicepresidenta, y a la sevillana Patricia del Pozo como secretaria.
Ciudadanos propondrá a Julio Díaz como candidato a una de las secretarías; IU presentará a José Antonio Castro, mientras que Podemos propondrá a Juan Moreno Yagüe como candidato a una de las vicepresidencias.
Las puertas del Parlamento andaluz son hoy escenario también de protestas de colectivos como los extrabajadores de Delphi o los Agentes Locales de Promoción de Empleo (ALPE), que se han concentrado desde primera hora ante la sede para hacer oír sus reivindicaciones.