La Liga árabe condenó hoy y calificó de “ejecuciones” la muerte de tres palestinos en Jerusalén por disparos de las fuerzas de seguridad israelíes.
El ayudante del secretario general de la Liga, Said Abu Ali, pidió, en declaración a la prensa, a la comunidad internacional y al Consejo de Seguridad que pongan fin de forma urgente a “esas ejecuciones sobre el terreno” y a las “violaciones graves contra la legitimidad y las leyes internacionales” por parte del “Gobierno de la ocupación israelí”.
Abu Ali agregó que esos “crímenes atroces”, del Ejército israelí y los colonos contra el pueblo palestino, confirman que Israel ignora los actuales esfuerzos políticos y diplomáticos para salir del “estado de estancamiento político”
Tres palestinos y un jordano murieron por disparos de las fuerzas de seguridad israelíes, el jueves y el viernes, en una cadena de sucesos que Israel ha descrito como “atentados” y la Presidencia palestina como “ejecuciones”.
Los sucesos pusieron fin a varias semanas de calma relativa en la zona tras un mes de Ramadán, entre principios de junio y de julio, que hacía presagiar un peligroso repunte de la violencia.
El último palestino muerto ayer fue tiroteado por soldados israelíes tras atacar a uno de ellos con un cuchillo en un cruce del distrito de Hebrón (en Cisjordania ocupada).
Poco antes, una pareja palestina del mismo distrito de Hebrón fue tiroteada después de empotrar su coche contra una parada de autobús a la entrada de un asentamiento, donde causó heridas entre leves y moderadas a tres civiles.
La de ayer fue una de las jornadas más violentas de las últimas semanas, cuando parecía amainar la ola de violencia que comenzó el pasado 1 de octubre.
Desde entonces han muerto al menos 226 palestinos, al menos dos tercios de ellos en ataques o presuntos ataques contra israelíes y el resto en redadas y manifestaciones en Cisjordania, Gaza y Jerusalén Este.
En los ataques palestinos han muerto 36 israelíes y tres extranjeros.