En declaraciones a los medios tras declarar ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) como testigo de la causa contra la Mesa del Parlamento catalán por permitir votar resoluciones soberanistas, ha reclamado “una rectificación” del Gobierno regional para que no convoque el referéndum del 1-O.
Millo ha avisado de que si no se produce esta rectificación “habrá un momento en el que estos dirigentes no estarán capacitados para representar al Govern” y que si hacen el referéndum deberán rendir cuentas ante la justicia.
Ha asegurado que el Gobierno central garantizará que se cumpla la legalidad vigente y está convencido de que “nunca habrá un referéndum de independencia ni una legalidad paralela”.
Pese a que no ha detallado el contenido de su declaración ante el juez, ha explicado que ha argumentado la posición del PP cuando él era su portavoz en el Parlamento catalán “en defensa del cumplimiento de la legalidad y de las sentencias del Tribunal Constitucional (TC)” en los debates de la Cámara.
Ha sostenido que la presidenta del Parlamento regional, Carme Forcadell, y la Mesa “intentaron situarse por encima de la legalidad vigente”, y que no respetaron las sentencias del TC.
DESCONEXIÓN 'EXPRÉS'
Ante el dictamen del Consell de Garanties Estatutàries (CGE), que dictaminó el jueves que utilizar el mecanismo de lectura única para aprobar en un solo día las leyes de 'desconexión' vulnera el Estatut y la Constitución, Millo ha destacado que es “un nuevo indicio de que quieren actuar fuera del marco legal”.
Además, ha criticado a JxSí por considerar que el CGE avala este mecanismo, lo que ve como “un ejercicio de imaginación y creatividad”, porque cree que el dictamen deja claro que la lectura única solo se puede utilizar en unos supuestos que no corresponden a lo que pretende JxSí y la CUP.