Todos los grupos parlamentarios, a excepción de PNV y PSE, han aprobado en comisión el informe de conclusiones sobre las irregularidades detectadas en el fraude de los comedores escolares de la escuela pública. Este informe, que ha salido adelante con los votos de la oposición (que es mayoría en la Cámara de Vitoria) culpa al Gobierno vasco (en concreto, a su Departamento de Educación) de la falta de control que hizo posible el fraude, cifrado entre 70 y 80 millones de euros. De ellos, la comisión cree que entre 42,1 y 48,5 millones “se habrían detraído a las familias” de los alumnos a través de las cuotas de comedor. Escribe Eduardo Azumendi.