En rueda de prensa este lunes, el día que ha empezado el juicio contra Torra por presunta desobediencia, ha criticado que “Torra se ha sentido siempre más a gusto como líder de los CDR que como presidente de los catalanes; ha sido un agente tóxico para la convivencia, y ha sido más un provocador que un gestor”.
Serrano ha insistido en que “ningún gobernante tiene impunidad para hacer lo que le da la gana, a pesar de que Torra se ha creído durante mucho tiempo que tenía impunidad”.
Por eso, cree que “un presidente como Torra solo podía acabar en el banquillo de los acusados, acusado de desobediencia”, y ha criticado que reconozca que desobedeció al no retirar el lazo amarillo del Palau de la Generalitat como le pedía la Junta Electoral Central (JEC).
“Hoy Torra lejos de querer protagonizar un episodio épico o heroico como cuando se autoinculpó por hechos que carecían de trascendencia penal, se está defendiendo, en un episodio más de patetismo que arrastra su personaje”, ha recriminado.
Además, ha sostenido que Cataluña merece tener un presidente que no acabe sentado en el banquillo de los acusados, condenado o huido de la justicia: “No estamos condenados a vivir en la anormalidad política permanente y las próximas elecciones autonómicas son una oportunidad para salir de esta situación”.