La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, viajó hoy a Santiago de Chile, donde se reunirá con su homóloga Michelle Bachelet y participará en encuentros entre empresarios de ambos países.
Según la agenda difundida por la Presidencia brasileña, Rousseff llegará a Santiago alrededor del mediodía y se dirigirá desde el aeropuerto hacia la Plaza de la Ciudadanía, frente al Palacio de la Moneda, donde depositará una ofrenda floral en el monumento al héroe de la Independencia chilena Bernardo O'Higgins.
Tras ese acto, será celebrada la ceremonia oficial de bienvenida, que incluirá un almuerzo ofrecido por Bachelet a la mandataria y su delegación.
Las presidentas tendrán luego un encuentro privado, después del cual está prevista una declaración de ambas a los periodistas.
Por la tarde, Rousseff se reunirá con empresarios brasileños que operan en Chile.
La visita será la primera de carácter oficial que Rousseff haga a Chile desde que Bachelet inició su segundo mandato, en marzo de 2014.
Según fuentes oficiales, la agenda que tratarán las mandatarias estará dominada por asuntos económicos y comerciales.
A fines del año pasado, ambos países firmaron un acuerdo para la promoción y protección de inversiones mutuas, considerado un marco para avanzar hacia una mayor cooperación económica bilateral.
Actualmente, Chile mantiene en Brasil unas inversiones por cerca de 26.000 millones de dólares, una cifra cuatro veces superior a los capitales brasileños en el país austral, que aspira a promover una mayor presencia de empresas brasileñas en su economía.
La corriente comercial bilateral se sitúa en torno a los 7.000 millones de dólares anuales, pero tanto el Gobierno de Rousseff como el de Bachelet consideran que esa cifra aún no refleja el potencial de ambas economías.