La portada de mañana
Acceder
Sánchez impulsa una regeneración que incluye una reforma del Poder Judicial
La fumata blanca de Sánchez: cinco días de aislamiento, pánico y disculpas al PSOE
Opinión - ¿Y ahora qué? Por Marco Schwartz

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Sánchez, a Díaz: “Yo soy quien marca las líneas políticas a nivel federal”

EFE

Madrid —

0

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha asegurado hoy que comparte la postura expresada por la presidenta andaluza, Susana Díaz, sobre los pactos de gobierno, pero le ha recordado que ella tiene “cultura de partido” y que es la dirección federal y su líder el que “marca y propone las líneas políticas”.

Sánchez ha trasladado este mensaje a Díaz y al resto de barones socialistas durante la rueda de prensa ofrecida en la sede de Ferraz tras su reunión con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el Palacio de la Moncloa.

“Comprendo y comparto muchas de las declaraciones que se han hecho por parte de Susana. Comparto esas declaraciones, pero ella tiene cultura de partido y sabe que es esta dirección federal y mi persona, como secretario general, quien marca y propone las líneas políticas a nivel federal”, ha dejado claro.

“Y esa cultura de partido y esa responsabilidad como dirección federal y como secretario general las voy a cumplir”, ha añadido Sánchez.

Susana Díaz dijo ayer, martes, que los ciudadanos han “colocado” al PSOE en la oposición tras las elecciones generales, por lo que ha instado a su partido a evitar el “aventurismo político” y el “oportunismo”, en alusión a posibles pactos a varias bandas con formaciones de izquierda.

Sánchez ha comentado que desde el pasado domingo, ha hablado “bastantes veces” con los líderes regionales de su partido para intercambiar impresiones sobre el complejo escenario surgido de las urnas.

Los barones de más peso, como Díaz, el extremeño Guillermo Fernández Vara y el castellanomanchego Emiliano García-Page, convienen en no apoyar la investidura de Rajoy, que el PSOE lidere la oposición y que se busquen alternativas de cambio siempre que no sea a costa de pactos con partidos que defienden el derecho a decidir, como Podemos, o la independencia de Cataluña, como ERC.