Los sonidos de los proyectiles de mortero y de los bombardeos en las proximidades de Damasco se ha apagado hoy en la capital, gracias a la tregua iniciada ayer en todo el país, según pudo constatar Efe.
La situación es muy tranquila en la ciudad, donde es habitual la caída de cohetes disparados por grupos armados desde áreas de la periferia.
Tan solo ayer, unas horas antes de que el cese de las hostilidades entrara en vigor dos proyectiles de mortero impactaron en la zona de Mezze, donde causaron daños materiales.
La Comandancia Suprema de las Fuerzas Armadas sirias anunció el lunes el comienzo de un alto el fuego a las 19.00 hora local (16.00 hora GMT), que durará siete días.
La tregua ha sido aceptada por la Coalición Nacional Siria (CNFROS), principal alianza política opositora, y por el Ejército Libre Sirio (ELS).
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos no ha documentado la muerte de ninguna persona desde el inicio del alto el fuego, donde se ha instalado una calma relativa en la mayor parte del territorio.