El ministro de Sanidad, Salvador Illa, y el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, han comparecido justo después de la comisión de seguimiento de la COVID-19 que preside Pedro Sánchez y justo antes de reunirse con el grupo de coordinación entre el Gobierno central y el de la Comunidad de Madrid. También justo después de que la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, hayan exigido que se retire el estado de alarma decretado el pasado viernes porque Madrid ha bajado su incidencia acumulada a menos de 500 casos. Illa, por el momento, lo descarta: “Hay que actuar con prudencia” con los datos, y “el horizonte que nos hemos fijado son 14 días”, que son los que marca el Real decreto de estado de alarma. En la misma rueda de prensa, han notificado 7.118 nuevos casos de COVID-19 en España, 2.759 en 24 horas, y 80 muertes.
El ministro también ha reconocido que le “preocupan cosas” de las cifras que está dando Madrid, “no lo digo como reproche” sino como “constatación”. Y en todo caso, se debe al volumen de casos“ que hay en la región, ”no por negligencia de responsables técnicos y sanitarios“, ha matizado. Concretaba luego que se refería al retraso ”entre 5 y 8 días“ de las cifras de contagios consolidadas; y al descenso de pruebas PCR que se realizan, ”un 40,3% menos“, según sus datos, respecto a la última semana de septiembre. ”Sabemos todos“ que esto ocurre. ”Sé que se han hecho test de antígenos“ pero aun así, la bajada es muy grande y ”hay que valorar los datos con prudencia“.
Illa ha recordado que la tasa de incidencia acumulada de 500 casos es uno de los tres umbrales fijados por las comunidades para el cierre perimetral de municipios de más de 100.000 habitantes, y para la limitación de aforos y horarios. Otro es superar el 10% de positividad –cantidad de PCR que confirman la infección– y el 35% de ocupación de UCI por COVID-19. Están estipulados en una orden aprobada sin el voto de las comunidades del PP –menos Castilla y León– en Consejo Interterritorial. Al tumbar el cierre perimetral el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, el Ministerio optó el pasado viernes por el estado de alarma que, ha recordado Illa, da “cobertura legal” a esa restricción de movilidad hacia y desde nueve ciudades madrileñas. No implica autoridad sanitaria delegada ni mando único.
Salvador Illa ha sido preguntado por su entrevista esta mañana en la Cadena SER, en la que ha declarado que “la incidencia acumulada tiene que bajar muchísimo más”, “no por debajo de 500, sino por debajo de 200 como mínimo”. No ha especificado si la idea del gobierno es alargar el estado de alarma hasta llegar a esos índices –para lo cual, más allá de 14 días, necesitarían apoyos en el Congreso–, pero sí que “hay que tener este horizonte y las CCAA son las responsables de tomar el conjunto de medidas” para ello. “Tenemos que estar todos en una incidencia acumulada de 100”, ha repetido, y además con otros valores como la “positividad de 3%”.
Mañana miércoles hay Consejo Interterritorial con los demás consejeros de Sanidad regionales, pero no se ha desarrollado todavía con qué mecanismo se van a evaluar en ese encuentro o en el grupo de coordinación con Madrid cómo se levantan las medidas. En este periodo de 14 días sí que van a ver “qué medidas tienen pensado poner en práctica para bajar no de 500, sino de 400, 300 o 200”. El técnico Fernando Simón, hace dos semanas, ya colocó ahí el objetivo al que se tenía que llegar, muy por debajo de 500.
En la rueda de prensa también han felicitado a los madrileños por la “responsabilidad” de los últimos días y lo han ejemplificado dando datos de tráfico: ha habido un 46,11% menos salidas y entradas de vehículos en la capital de España en el puente del Pilar de 2020 respecto al de 2019. Al margen de eso “no voy a valorar” los argumentos de Madrid ni “entrar en ningún tipo de confrontación”, advirtiendo igual que actúa movido solo por “la salud pública”. Díaz Ayuso y Martínez Almeida le habían acusado minutos antes de tener “secuestrados” a los madrileños.