La portada de mañana
Acceder
Sánchez impulsa una regeneración que incluye una reforma del Poder Judicial
La fumata blanca de Sánchez: cinco días de aislamiento, pánico y disculpas al PSOE
Opinión - ¿Y ahora qué? Por Marco Schwartz

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Vías legales y ayuda a África, la clave para frenar llegadas según los expertos

EFE

Bruselas —

0

La Unión Europea necesita, para frenar la inmigración irregular, una política migratoria que incluya vías legales de acceso, una cooperación más amplia con los países africanos y un sistema de acogida de refugiados, explican hoy distintos expertos a Efe.

En la última cumbre europea, celebrada esta semana, los líderes de los Veintiocho insistieron en la necesidad de cortar los flujos desde la raíz, combatiendo las redes de tráfico en el Mediterráneo, haciendo más efectivos los retornos de los inmigrantes que no tienen derecho a permanecer en la UE (en 2017 solo el 36,6 % fueron devueltos) y con más cooperación con África.

Stefani Weiss, del centro de estudios Bertelsmann Stiftung, explica a Efe que involucrar a esos países en la gestión de la inmigración exige una cooperación más estrecha y amplia que la existente en la actualidad.

Según esta experta, “la actual política de desarrollo (europea) no es suficiente ni está lo bastante orientada para crear crecimiento y empleo en la región”.

“Las remesas de los inmigrantes que han abandonado África subsahariana ascienden a cerca de 40.000 millones de euros, lo que supera cualquier inversión extranjera directa y en el caso de Liberia añade un 25 % al PIB de ese país. El porcentaje es también muy alto en otros países de la región”, dice Weiss.

Los flujos solo pueden ser gestionados eficazmente “si la UE contribuye a un desarrollo económico en África subsahariana que mejore las condiciones de vida y reduzca las causas de la migración”, añade.

En ello coincide Geert Laporte, subdirector del Centro Europeo para la Gestión de Políticas de Desarrollo y la Migración (ECDPM), que considera que la ayuda a la UE debe incluir ofertas de comercio justo, inversiones, mejores regulaciones de visados o más programas de intercambio para estudiantes.

“Si esto no se hace, las oleadas de inmigrantes económicos de África serán imparables”, advierte Laporte a Efe.

En paralelo, dicen los expertos, se deben crear rutas regulares para la migración, que a la vez eviten la fuga de cerebros, algo que según Weiss ya se produce en algunos países como por ejemplo Ghana, donde cerca del 80 % de los médicos que han estudiado en ese país, “ahora están trabajando en el Reino Unido”.

Según Laporte, aunque la UE “no debe ser responsable de absorber grandes cantidades de inmigrantes económicos que han ingresado ilegalmente en la UE”, si podría “desarrollar más vías legales para la migración temporal”.

Ello “no resolvería el problema para la mayor parte de los inmigrantes económicos, pero ”podría ofrecer una perspectiva a ciertas categorías de inmigrantes económicos que están en busca de una vida mejor“, opina.

Este experto cree también que la UE “necesita una política más coherente, tanto a corto como a largo plazo, para gestionar el problema de los refugiados y las migraciones”.

Indica que “mientras que por el momento la inmigración económica está bastante bien controlada, se puede esperar que, con la explosión demográfica en los próximos años y la mala gobernanza en muchos países africanos, varios millones de africanos intentarán llegar a Europa”.

Por ello considera “inevitables” los acuerdos con países como Turquía o quizá en el futuro Egipto.

También la Unión “debe ser generosa con los refugiados (políticos) que son víctimas de conflicto o represión. Los solicitantes de asilo deben ser protegidos a todo precio. En esos casos, la solidaridad entre los Estados miembros es esencial”, considera.

Laporte lamenta la división en la UE y que “muchos estados miembros no estén dispuestos a aceptar solicitantes de asilo” y opina que “deberían ser sometidos a más presión para que lo hagan”.

Sobre los refugiados, Weiss considera por su parte “una lástima” que los estados miembros no hayan sido capaces de acordar cuotas, aunque admite que esto “no resolvería el problema de la migración”.

Según Laporte, para evitar que cale el discurso populista que considera a los inmigrantes como una amenaza, no basta con reiterar que no hay una crisis migratoria en este momento, sino que se debe ofrecer oportunidades a aquellos europeos “que se sienten excluidos y no escuchados por sus políticos”.

“Hay una necesidad urgente de ofrecer alternativas a aquellas personas que se sienten abandonadas (...) o de otra manera esto podría tener consecuencias importantes en las elecciones europeas de mayo de 2019”, alerta.