Tras tener que renunciar a disputar la Copa Davis, uno de los torneos que más ansía y que aún no ha podido colocar en su cada vez más apretada vitrina de trofeos, Carlos Alcaraz ha puesto punto final a su espectacular temporada 2025 de forma abrupta, retirándose por culpa de una lesión en los músculos isquiotibiales que se le originó durante la final de la ATP Finals disputada ante Sinner. El tenista murciano ya piensa por tanto en 2026, una temporada en la que defenderá muchísimos puntos tras haberse impuesto en Roland Garros y en el US Open, por lo que la batalla por mantenerse como número uno del mundo todo parece que va a seguir siendo tan fratricida como lo ha sido en la presente temporada que está a punto de acabar.
La noticia de la renuncia, que confirmaron Alcaraz y la Real Federación Española de Tenis, detallaba que el número uno del mundo padece un edema en el isquiotibial de la pierna derecha. Tras la final perdida en Turín, el tenista español se desplazó a Bolonia y se sometió a una resonancia magnética, prueba que detectó el edema. Los médicos, tanto Ángel Ruiz Cotorro como Juanjo López, le advirtieron que se exponía a una rotura muscular si competía en Bolonia junto a sus compañeros del combinado español. Aunque inicialmente fuentes federativas señalaron solo una “sobrecarga” y no una rotura, la recomendación médica final fue no competir debido al riesgo.
Alcaraz, tras lamentar su baja y asegurar que jugar por España “es lo más grande que hay” y que le hacía “mucha ilusión poder ayudar a pelear por la Ensaladera”, regresa a Murcia para descansar y dejar atrás cuanto antes la lesión en su pierna. La temporada de Alcaraz, por tanto, finaliza con un saldo de 71 triunfos y ocho títulos (incluyendo los dos Grand Slams mencionados) y ya piensa en la de 2026, aunque antes de los primeros partidos oficiales tiene previsto, en principio, disputar dos partidos de exhibición en el mes de diciembre, ambos en Estados Unidos y frente a Frances Tiafoe (en Nueva Jersey) y a João Fonseca (en Miami).
Ya en 2026 y tras disputar otra exhibición, en este caso en Corea del Sur y frente a su gran rival por la cima del tenis, Jannik Sinner, Alcaraz tendrá que emplearse a fondo para mantenerse como número uno del mundo. Y es que el inicio del nuevo año estará marcado por el intenso pulso con el italiano. Aunque la ventaja de Alcaraz no es amplia, el español tiene su posición asegurada al comienzo de la temporada. Y, al menos, hasta el mes de febrero. Con la calculadora en la mano, por ejemplo, se puede observar que Alcaraz no podrá perder el número 1 del mundo durante el Open de Australia, el primer Grand Slam del año y que se celebrará en enero. ¿La razón? Que Alcaraz defiende solo 400 puntos (a raíz de su puesto de cuartofinalista en la última edición), mientras que Sinner defiende el título, es decir, 2000 puntos. La diferencia actual entre ambos es de 550 puntos.
Por lo tanto, Alcaraz seguirá siendo número uno hasta entrado el mes de febrero, lo que le permitirá igualar al extenista norteamericano Jim Courier con 58 semanas como líder del tenis mundial. Si sigue acumulando semanas en lo más alto, Alcaraz irá alcanzando los récords establecidos por otras grandes leyendas del deporte de la raqueta, como Edberg, Hewitt o el mismísimo Agassi. Pero, para ello, tendrá que soportar la presión del actual número dos del mundo, Sinner, que se acrecentará a partir del mes de febrero.
A partir de Róterdam
Y es que el italiano no defiende puntos durante tres meses de competición (incluyendo los torneos de Róterdam, Dubai, Indian Wells y Miami), los meses que no saltó a ninguna pista a razón de su sanción, lo que le permitiría ver crecer su número de puntos. Alcaraz, en cambio, sí que defiende puntos, 1.010 puntos en total a lo largo de ese tramo de la temporada. Si Alcaraz pierde en cuartos o antes en Australia y Sinner revalida el título, el tenista murciano perdería la ventaja actual de la que disfruta, por lo que la primera posibilidad de Sinner de volver a ser el número uno del mundo podría ser durante el torneo de Róterdam. Es el problema de haber cosechado una gran cantidad de puntos frente a un rival que no pudo jugar varios torneos.
A partir de ahí la batalla por el número uno será aún más complicada para el tenista español. Con la llegada de la gira sobre tierra batida, Sinner no defenderá ni un solo punto en Montecarlo, Barcelona o Madrid, mientras que a Alcaraz la calculadora le recordará todo lo cosechado en ese tramo de la temporada. Será una preciosa batalla para los amantes del tenis, en cualquier caso, que podrán ver de nuevo a ambos titanes dándolo todo en la catedral de la tierra batida, Roland Garros, en el que Alcaraz y Sinner se juegan 2000 y 1300 puntos, respectivamente, tras aquella inolvidable final disputada a cinco sets y que cayó del lado del murciano tras una batalla de más de cinco horas.