El examen de auxiliares de la policía de Porto do Son destapa denuncias de “enchufismo” contra el alcalde del PP
Irregularidades en los exámenes y cuatro de las cinco plazas en juego que acaban en familiares del alcalde o personas vinculadas al PP local. Esa es la denuncia que se ha hecho sobre dos procesos de selección de personal municipal llevados a cabo por el Ayuntamiento de Porto do Son en el pasado mes de mayo. Ha sido el grupo municipal de Portodos, formación política de este pequeño municipio costero, quien desveló las presuntas “anomalías” en las pruebas, que fueron denunciadas también por algunos de los aspirantes que realizaron los exámenes y que niega rotundamente el alcalde.
Portodos ha denunciado las sospechas que rodearon estos dos procesos de selección (para cuatro plazas de auxiliares de policía local y para tractorista) y se ha hecho eco de las denuncias que varios de los participantes en las pruebas transmitieron sobre el discurrir de estas. Según asegura, en la que ofertaba puestos para el cuerpo de la policía municipal, uno de los funcionarios responsable de los exámenes y miembro del tribunal “les mostró las respuestas a las personas elegidas”, además de “murmurar” durante la prueba con dos de las mujeres que han acabado obteniendo la plaza.
Varias de las personas que participaron en los exámenes coinciden en las quejas. Por lo menos tres testimonios ratificaron que “se les enseñaron las respuestas” a varios de los aspirantes y que “fue un escándalo”. “Hubo quien protestó en pleno examen y quien puso una reclamación nada más salir de él, pero los responsables lo negaron todo”, explicaron, tanto públicamente en las redes sociales como por privado a miembros de la corporación municipal.
“Qué raro que las dos mujeres que aparecen en las listas tengan la misma puntuación”, añaden algunos de los examinados. Al comprobar los datos públicos difundidos por el Ayuntamiento sobre el resultado de las pruebas, las dos mujeres con mayor puntuación en el proceso obtuvieron ambas un 7,868 en la “prueba de conocimientos”, que consistía en 50 preguntas tipo test (con cuatro respuestas posibles) propuestas por el tribunal. Sobre este examen, afectados han denunciado que había preguntas repetidas, una “duplicidad” en las cuestiones de la que también advirtió el grupo municipal de Portodos, que se pregunta si esa repetición se debía a que eran ya sabidas por algunos de los aspirantes a los puestos de trabajo.
Otro examen sobre “conocimiento del término municipal y toponimia”, con un 3 como máxima puntuación posible, completaba las pruebas escritas de un proceso que incluía dos asequibles pruebas físicas y otra sobre gallego con la que bastaba poseer un certificado de la ESO. Finalmente, las cuatro personas con mayor nota en el proceso accedieron a la plaza de auxiliar de policía, por las que se les hará un contrato de cuatro meses para este verano.
Según denuncia Portodos, tres de las cuatro que accedieron a esos puestos en la policía local “tienen relación familiar con el alcalde Luis Oujo o forman parte de su círculo de amistades”. “¿Simple casualidad? Cada uno que saque su conclusión”, se pregunta el partido, que advierte de “enchufismo” y de unos procesos de selección puestos en tela de juicio ya desde hace años.
El regidor popular, Luis Oujo, por su parte, ha negado cualquier tipo de irregularidad y reconoce que uno de los participantes en el proceso selectivo acudió al Ayuntamiento a denunciar la forma en la que se llevaron a cabo las pruebas. “En cuanto lo supe, reuní el tribunal para saber si había ocurrido algo y me negaron rotundamente que hubiese algo irregular”, dice el alcalde, que asegura que no hubo “ninguna reclamación más” pero que asegura estar dispuesto “a volver a reunirse” con dicho tribunal “si hubiese cualquier duda”.
Según el regidor, el grupo Portodos está “politizando” un tema que, advierte, no va más allá. Además, acusa de “falta de respeto” al tribunal de las pruebas y recuerda que sus componentes cumplen con todos los requisitos legales, a pesar de que desde la formación local se denuncia que “un fontanero municipal y un conserje de un colegio evalúen la preparación o no de los aspirantes a auxiliares de policía”. “No se puede acusar sin pruebas; si las tienen de algo, que reclamen en el Ayuntamiento”, responde Oujo sobre todas las acusaciones.
En cuanto a la prueba para la contratación de un tractorista, Portodos y varias personas afectadas denuncian que no se tuvo en cuenta la experiencia laboral de aspirantes en el proceso de selección, lo que les ha rebajado significativamente la nota final, además de “falta de transparencia” a la hora de realizar las pruebas al impedirles a los participantes estar presentes mientras se llevaban a cabo. Según la formación política, la persona seleccionada tiene relación familiar con personas que concurrieron con el PP a los últimos comicios locales.
La formación local asegura que presentará, junto con varios de los participantes en las pruebas, una reclamación conjunta en el Ayuntamiento para que se “repitan los exámenes, pero con un tribunal que incluya funcionarios de la policía”. Además, piden al alcalde Luis Oujo que “dé explicaciones”, así como “saber quién ha sido la persona o personas que elaboraron los exámenes tipo test y quien custodió las pruebas antes de que se celebraran”. De no haber respuesta, Portodos no descarta acudir a los tribunales ante un “proceso contaminado, cargado de graves irregularidades y con relaciones de parentesco y amiguismos de por medio”. Además, aseguran tener pruebas de las relaciones personales “evidentes” entre cuatro de los cinco seleccionados.
“Fue muy descarado lo que hicieron”, denunció uno de los participantes en el proceso. “Ya está bien, recorro Galicia para conseguir un puesto y luego pasan estas cosas”, dijo otro al advertir de la denuncia. “No me sorprendo, por desgracia es así en casi todos los ayuntamientos [...]. Algunos procesos ni los acabo porque, básicamente, está todo vendido”, remata otro.
