La ilusión de toda una isla
La llegada de Jesé se produjo sobre las 12:00 horas al aeropuerto de Gran Canaria, se presentó en una sala de prensa abarrotada pasadas las 18:00 horas y salió al césped ante casi 10.000 almas, que previamente se agolpaban a las afueras del recinto, cuando caía la noche con los alrededor de 18 grados que hacían en el recinto de 7 Palmas.
El júbilo invadió a los que quisieron acudir a ver al grancanario vistiendo la elástica amarilla, esa con la que iba al campo de pequeño, con su padre, a ver al mismo equipo que ahora lo recibe como la ilusión personificada.
Con un dispositivo de seguridad sin precedentes, con su familia y sus seres queridos en el banquillo, Jesé salía del túnel de vestuarios y lo primero que hacía era abrazar a su amigo, el presidente de la UD Las Palmas, Miguel Ángel Ramírez.
Tras unos toques a varios balones dispuestos en fila, el jugador los iba regalando a un público que no paraba de vitorearle. Unos chavales llegaron a saltar al campo a abrazarle mientras la seguridad trataba de apartarlos, pero el jugador lo solventó regalando una pelota a uno de ellos.
El sentimiento se lleva incubando durante meses, quizá antes de que Ramírez reconociera por diciembre que se estaba tratando de hacer posible lo imposible.
“La ilusión no se come -dijo ella. No se come, pero alimenta -replicó el coronel”, relataba García Márquez en el 'Coronel no tiene quien le escriba' (1961). Y en la UD Las Palmas, donde como recordaba Setién, los extremos en la victoria y en la derrota se alcanzan con facilidad, las expectativas suben y bajan en un instante.
La trayectoria de Jesé es un aval más que suficiente para generarlas, aunque no dependan de él, sino de todos aquellos en los que depositan sus sentimientos en su talento, de sobra conocido, para seguir soñando. Basta con imaginar al futbolista junto a Boateng (que también provocó lo suyo) o Jonathan Viera.
El 'equipillo' con Jesé adquiere otra dimensión y la palabra UEFA, pronunciada en varias ocasiones por el futbolista durante la rueda de prensa, ha sustituido a 'luchar por objetivos más importantes'. El lunes frente al Granada, a domicilio (una circunstancia en la que Las Palmas solo ha conseguido una victoria), la ilusión y la realidad se darán la mano.