El Gran Canaria cierra su historia en el CID como la empezó: perdiendo
El Herbalife Gran Canaria, el quinto clasificado de la Liga Endesa, abandonó este domingo el pabellón del Centro Insular de Deportes (CID) con una dolorosa derrota ante el segundo clasificado, Valencia Basket, un resultado que también cosechó en su debut ante el Mayoral Maristas de Málaga.
A partir del 1 de mayo el conjunto que entrena Pedro Martínez recibirá a sus contendientes en el Gran Canaria Arena, el legado que hereda la isla de la Copa del Mundo 2014.
El fortín del Granca, que fue inaugurado el 22 de octubre de 1988, ha albergado 399 partidos de la ACB -256 victorias- y 50 compromisos europeos -44 triunfos-, donde los amarillos cimentaron, en gran medida, su actual solidez y firmeza.
Además, el CID acogió otros importantes eventos del deporte de la canasta como la Copa del Rey de 1990, que ganó el CAI Zaragoza, y la Supercopa de 2009, que conquistó el FC Barcelona.
En esta ocasión el CID reunió a casi 5.000 almas para llevar en volandas al Granca, pero el conjunto amarillo no ha podido sorprender a la revelación de la temporada, un Valencia que acreditó el potencial de un segundo clasificado.
El ala-pívot Nacho Martín, uno de los últimos en incorporarse al Granca, dijo a Efe que ganando hubiera sido todo “mucho más bonito”, pero que el Valencia tiene muy buen equipo -“por eso está segundo”-, y reconoció que hoy ha sido “mejor”.
“La afición grancanaria es de 12 porque, aún perdiendo, animó hasta el final. El calor se siente muchísimo y nos va a dar pena no volver a jugar en el CID”, destaca Martín, quien agrega que le va a quedar morriña, aunque el nuevo es “muy bonito” y será una experiencia “tremenda” jugar en él.
Por su parte, el capitán del Granca, Tomás Bellas, cree que este ha sido un buen partido para cerrar el CID, aunque no pudieron ganar “un partido muy físico por los pequeños detalles”.
Bellas cree que el Herbalife no ha sido “respetado” en alguna ocasión por los árbitros, algo que les ha pasado en otras jornadas, pero que lo han dado todo y que eso es “un motivo de satisfacción”.
El base madrileño afirma que echará de menos el CID porque lleva jugando allí como profesional sus cinco años en la isla y, sobre todo, porque el pabellón es su casa. Con todo, espera que en el Gran Canaria Arena también reviva esa “sensación”.
“La unión que tenemos con la afición es increíble. Escuchar palmas y que volvamos a salir a la cancha es impresionante, así que espero que se mantenga ese espíritu en el nuevo pabellón y, desde aquí, les doy las gracias a todos”, añade Bellas.
El presidente del Herbalife Gran Canaria, Joaquín Costa, recordó que la llegada al CID se saldó con otra derrota y que luego el pabellón ha significado mucho para el club en estos últimos 26 años, con triunfos históricos y grandes jugadores y equipos, por lo que se va con “agradecimiento” por lo que representó durante ese tiempo.
“No voy a hacer valoración del partido ni de los árbitros, creo que ha sido un choque muy disputado contra un gran equipo. Los jugadores se han entregado y dejado la piel como siempre y eso es una muestra de orgullo”, subraya.
Rafael Suárez, uno de los aficionados más fieles del Granca, asegura que va a extrañar al CID y que se emocionó porque este pabellón es “algo tan cercano y familiar que, por muy moderno que sea el Gran Canaria Arena, se va a notar”.
Suárez ha lamentado que no se haya cerrado el ciclo del CID con un triunfo, pero, a su juicio, hubo una jugada “clave” que fue la personal de ataque señalada a Báez que, en su opinión, “no existió”, y que impidió el Granca acercarse en el marcador.
En esa línea, otro de los seguidores históricos, Pedro Jesús Batista, que sigue al Granca por toda España desde antes de que fuese equipo ACB, asegura que va a añorar el CID porque es “una familia entera”, y se mostró esperanzado en que ahora se le agregue más miembros en el nuevo recinto.