Un partido interminable
El tenista estadounidense John Isner y el francés Nicolas Mahut han grabado sus nombres en los anales de la historia del tenis al protagonizar una batalla de épicas proporciones en el encuentro que les midió en la primera ronda del torneo de Wimbledon, tercer Grand Slam de la temporada, y cuyo quinto y set final volvió a interrumpirse por falta de luz en un hasta hoy inverosímil 59-59.
El choque, que se prolongó hasta las diez horas de inagotables esfuerzos, se paralizó por segundo día consecutivo después de retomar su concurso en el último parcial tras su suspensión por nocturnidad este martes, cuando concluyeron la actividad en tablas 6-4, 3-6, 7-6(7) y 6-7(3).
Tras la reanudación en la jornada del miércoles, en la Pista 18, la contundencia desde los servicios impulsaron estos extraordinarios guarismos al no certificarse ningún break. Sin embargo, fue el Carolina del Norte el que gozó de las cuatro únicas opciones de cerrar el pase para la segunda ronda con 10-9, con 33-32, y con el 59-58 al resto.
Pese a estas oportunidades, finalmente subsanadas por el galo, y con evidentes problemas físicos que requirieron de asistencia médica, el choque se pospuso nuevamente para el jueves, lo que podría ampliar aún más el récord precedente de los también franceses Fabrice Santoro y Arnaud Clement en Roland Garros en 2004, con 6 horas y 33 minutos de lance.