Webber y Alonso mandan entre la incertidumbre
El piloto australiano Mark Webber (Red Bull), líder del Mundial de Fórmula 1, marcó el mejor tiempo en la primera sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de Corea, donde Fernando Alonso (Ferrari) fue segundo en un ambiente de incertidumbre por un circuito desconocido y un asfalto levadizo y un tanto resbaladizo.
Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes) lideró la primera tanda de libres seguido de Robert Kubica (Renault) y Nico Rosberg (Mercedes), pero esta experiencia inicial en el circuito coreano sirvió como mera toma de contacto, ya que, en la segunda sesión, el mejor registro bajó tres segundos.
En esta segunda manga, Webber fue el único piloto capaz de bajar de 1:38 con un registro de 1:37.942, mostrando que su escudería ya está preparada para luchar por la victoria, aunque esta vez no tendrá un favoritismo tan claro como en otras citas de esta temporada, ya que Alonso se situó a menos de dos décimas.
El piloto español, uno de los que más rodó con un total de 62 vueltas entre ambas sesiones, dedicó la primera a experimentar --acabó a más de tres segundos de Hamilton-- y la segunda a buscar un buen tiempo que finalmente logró. El bicampeón mundial parece preparado para prolongar en Corea su remontada en el campeonato.
Por detrás de Webber y Alonso se situaron los bólidos de McLaren, con la intromisión de Kubica en el cuarto puesto. Lewis Hamilton fue tercero a algo más de tres décimas del líder y Jenson Button --quinto-- finalizó a casi un segundo seguido de Felipe Massa (Ferrari), que ha manifestado sus intenciones de ayudar a su compañero de equipo este fin de semana, pero que de momento está algo lejos.
De esta forma, la igualdad se ha instalado en el Gran Premio Corea, un Gran Premio novedoso donde los favoritos se van a jugar un buen pedazo del Mundial. De los candidatos al triunfo, el peor parado fue Sebastian Vettel (Red Bull), séptimo en un día que sufrió un pinchazo en la segunda sesión.
Por su parte, Jaime Alguersuari (Toro Rosso) concluyó decimoséptimo, aunque lo más positivo para el español, por primera vez compitiendo como el resto en un trazado desconocido para todos y no sólo para él, fue que su compañero, Sebastian Buemi, no le pudo superar, quedándose a más de 300 milésimas.