Nena, tú vales mucho

Ella siempre fue actriz, incluso cuando Fernando García Tola la ponía frente a las cámaras en un estudio de televisión, en los rótulos aclaraban que Carmen Maura aparecía “en el papel de presentadora”. La Constitución sólo tenía tres años cuando Fernado Tola demostró que la televisión podía ser algo útil para los ciudadanos, sin derecho de admisión para los frikis. En el programa “Buenas noches” Carmen Maura miraba al espectador como diciendo “no te duermas que te veo”, y empezaba con un monólogo cargado de ironía. Fue la presentación a la masa de esta mujer que se hizo actriz sin darse cuenta.

Cuando Tola la llamó para hacer de presentadora en Televisión Española Carmen Maura ya había rodado “Pepa, Luci y Bom y otras chicas del montón” dirigida por Pedro Almodóvar. El guión lo había escrito el realizador manchego cuando todavía trabajaba como administrativo en la compañía Telefónica. Carmen se convirtió en chica Almodóvar haciendo de Pepi en esa película que hoy no pasaría el filtro de lo políticamente correcto. La escena del policía que llegaba a casa de Pepi y le preguntaba por las macetas de marihuana que tenía en el balcón, que acaba con el policía violando a la joven, forma parte de un cine que sirvió para despedir a una España que se iba y un Madrid que se parece poco a esa ciudad que hoy regala mayorias absolutas al Partido Popular.

En aquella película con alma punk Carmen Maura se convirtió en la musa de Pedro Almodóvar. La etiqueta le duró una década, hasta la pelicula “Mujeres al borde de un ataque de nervios”, donde Carmen logró uno de los cinco Goyas que entregó la Academia de Cine y Pedro Almodóvar se acercó a su sueño al quedarse en las puertas de Hollywood con la candidatura al Oscar a la mejor pelicula extranjera. Después vino el divorcio artístico con el manchego. Se formó una leyenda sobre la ruptura y vimos a Penélope Cruz convertida en la nueva musa. Almodóvar fue cuesta abajo y Carmen Maura fue llamada por varios directores europeos.

Aquella Pepi que se levantaba la falda y enseñaba sus partes al policía para distraerlo, para que dejara tranquila sus plantas de marihuana, es una actriz que hoy hace papeles de abuela. Pero sigue con esa sonrisa de niña que conquistaba la cámara de televisión cuando hacía el papel de presentadora en el programa de Fernando Tola. Recuerdo aquel monólogo con el que arrancó uno de los programas televisivos, contaba cómo la descubrieron en un casting, le dijeron “Nena, tú vales mucho”.

Juan García Luján