Cinco: el Powerdans

Pretendía el Gobierno y su presidente que la oposición hablara de políticas, no de políticos. Pero los políticos que sustentan al Gobierno pueden mofarse del Chikilicuatre de López Aguilar cuando critica sus políticas, con datos, con su visión partidista, con su reivindicación del cambio al que aspiró y aspira una mayoría minoritaria social en las Islas. Y sobre todo con su verbo hiriente, ese que jode a la bancada gubernamental, hiriente como la realidad misma. Esa desenfocada y bipolar realidad que percibo en ocho meses de paulinato. Esa que no se analizó por CC y PP. Más bien todo lo contrario.

Puede que yo tampoco estuviera en la Cámara de Teobaldo Power. Que me perdiera el debate y no viera con mis propios ojos, quizás turbados por algún filtro virtual, cómo de una crítica política del portavoz socialista, al presidente del Parlamento de Canarias, Antonio Castro, se le descompusiera el rostro y puede que hasta el estómago al recordar JF el bochornoso incidente del fax precipitado al Rey en la investidura de Paulino Rivero. Qué fuerte. Castro tuvo que decir, metido en un berenjenal sin salida, que el fax no había salido de Canarias, que en todo caso había sido enviado antes de la votación pero nunca comunicado al Rey. Vale, se admite acuse de recibo como animal de compañía.

Me he quedado con las dos anécdotas showbisne del Debate. El rostro descompuesto de Castro y el chiste malo de Paulino invitando a JF a acudir a Eurovisión con Chikilicuatre. El presidente que en teoría debía debatir sobre el estado de las Islas hoy, el presidente que en realidad se ha dedicado a hablar de lo que va hacer en el futuro (reinvestidura lo han llamado), sólo tuvo como argumento -por cierto, tan mal acogido que ni se escuchó una sóla aprobación, aunque fuera reirle la gracia, desde su bancada- acusar a López Aguilar de showman que sólo quiere hablar de él: el “chiki chiki” de Juan Fernando.

Qué pobre presidente tenemos. Quizás quien tenga una necesidad imperiosa de ser entrevistado por Andreu Buenafuente sea Paulino Rivero. Debe haberse enterado ya que Christian Fernández, el defensa de la U.D. Las Palmas, se ha ganado con creces su minuto de gloria en La Sexta por su cachonda celebración del gol al Cádiz: Uno: el brikindans. Dos: el crusaíto. Tres: el maiquelyason. Cuatro: el robocó. Que añada Paulino: Cinco: el Powerdans. Y que don Teobaldo lo perdone.