Sobre este blog

Espacio de opinión de Canarias Ahora

Los uniformes

José A. Alemán / José A. Alemán

0

El tal Willy es un personaje que me intriga. Porque no sé si lo suyo es cosa de la caradura imprescindible para prosperar en el paulinato, o absoluta ignorancia de que el manejo de los dineros públicos ha de atenerse a ciertas formalidades y controles. Aunque no sea materia en la que destaque la administración autonómica que prima a algunos los botarates y no les digo en quien estoy pensando porque está el hombre de Congreso.

Pero, en fin, allá ellos. Mientras, sigue coleando lo de El Día. Varios personajes de la cultura tinerfeña han condenado los viajes de brosa que a diario echa el periódico sobre Gran Canaria. Algunos confesaron la vergüenza que les produce leer los editoriales y comentarios pepitianos. Mientras, los políticos callan o hablan bajito para que no les oiga don Pepito. Salvo Ricardo Melchior, presidente del Cabildo tinerfeño. Dijo, el muy osado, que él no le quitaría el “Gran” a Gran Canaria, lo que es de agradecer, pero, para compensar, quisiera que el obispo de las tres islas orientales pasara a llamarse “de Las Palmas”. Como doctores tiene la Iglesia y nunca mejor dicho, nada que objetar; sólo le diría que solicite el cambio al Vaticano pues fue Roma quien decidió llamar a la Diócesis oriental “canariense” o “de Canarias”. Si en esa decisión tuvo algo que ver el pérfido Sanedrín de Vegueta no es asunto que me concierna.

Quien sigue callado es el ex macho Soria por la cuenta que le tiene. No sólo guarda silencio sino que debe habérselo impuesto a su partido al que se le ve poco inclinado a favor de la moción cabildicia. No se trata, lo repetiré, de que se pretenda obligar a El Día a callarse, bonito fuera, sino de hacerle saber que esas no son formas. Pero don Pepito no es hombre de matices y descalificarlo a él es descalificar a Tenerife toda y a tanto no se atreve Soria. ¿O sí?

Sobre este blog

Espacio de opinión de Canarias Ahora

Etiquetas
stats