Estamos convencidos de que dará mucho que hablar el voto canario en el exterior porque, como ocurre en cada convocatoria electoral, las sospechas de fraude son más que evidentes. Pero en esta ocasión concurre la particularidad de que se encuentra vigilando a Coalición Canaria nada menos que Juan Fernando López Aguilar, que sabe que los nacionalistas canarios no acuden a Venezuela y a otras colonias en el exterior con la limpieza y naturalidad necesarios para aplicar allá las prescripciones de la Ley Electoral de aquí. Pero al voto emigrante, que ha sido decisivo para dos plazas al Senado por El Hierro y Tenerife, respectivamente, se ha unido el desastre de interventores y apoderados del PP. En la isla de Tenerife ha sido el PSOE el que ha terminado aportando sus actas de cada mesa para validar los votos de los conservadores al Senado. Parece que, finalmente el presidente del Cabildo gana a su subordinado, Antonio Alarcó, del PP, lo que aclaramos a los efectos oportunos [Una vez publicado este comentario se supo que nuevamente el PP arrebató el acta de senador al nacionalista Ricardo Melchios].