Jaime Bouzón, concejal de Turismo y otras cosas en San Bartolomé de Tirajana, ha decidido dar un giro radical a su pretensión de hacer una discoteca en la Plaza de Maspalomas, allí donde todo el mundo daba por hecho que habría unos aparcamientos. El Plan General sigue firme en esa calificación, y Bouzón, que fue cocinero antes que Fraile (como no nos cansaremos de repetir) ha preferido vender la propiedad por lo mismo que le costó, como se empeñó en asegurar a todo el mundo este miércoles en Fitur. Asegura haber vendido asunto tan estratégico a Juan Padrón Marrero, que piensa hacer allí una bolera. Lo malo, entendemos nosotros con las entenderas que Natura nos ha proporcionado, es que aquello sigue teniendo calificación de aparcamientos, y una bolera es otra cosa.