Se ha desvivido el muy ilustre alcalde de Santa Brígida, el niño Bravo (de Laguna y Cabrera) para contestar rapidito a la incansable concejal de Coalición Canaria, Victoria Casas, sobre las extrañas personaciones aparecidas en el sumario del caso Brisan. La señora Casas venía denunciando públicamente que el ínclito político se había personado desde junio pasado, pocas fechas después de hacerse con el bastón de mando. Una personación, aclaremos, que el niño y su equipo del PP, más los ecopijos (por el flanco teóricamente izquierdo), negaban sistemáticamente, incluso en los plenos, con la bendición de la secretaria municipal. Ahora resulta que sí está personado, y que lo hizo la letrada Sandra Rodríguez, del despacho de su padre, sin autorización del muy desagradecido alcalde. Atención al subrayado, que tiene su cosa, pero que se aclara a continuación.